Es común pensar que los artistas o famosos son afortunados, están protegidos y tienen una vida “perfecta”, pero la realidad es completamente diferente.
Dove Cameron es una actriz y cantante estadounidense conocida por sus papeles en producciones de Disney como “Liv y Maddie” y “Descendientes”. Recientemente en una entrevista, la actriz dio a conocer las consecuencias de varias tragedias que ha tenido que soportar a lo largo de su vida, y recalcó por qué es importante hablar sobre ellas.
Dove Cameron se sincera sobre haber tenido pensamientos suicidas
Uno de los grandes mitos sobre el suicidio es que, si hablamos de él, estamos incentivando que ocurra. Por ello, temas referentes al suicidio han sido altamente estigmatizados e invalidados a través de los años, lo cual produce que no se hable de ello.
En consecuencia, las personas que padecen pensamientos suicidas pueden sentirse juzgadas y avergonzadas, lo que complica la identificación temprana de aquellos en riesgo.
Abordar el tema del suicidio de manera correcta es una forma de prevención. Así lo explica Dove Cameron en una reciente entrevista con Byrdie. “Si pudiéramos ser más abiertos sobre el suicidio y la salud mental, creo que habría mucha gente diría: ‘Oye, siento que no hay otra opción. ¿Puedes mostrarme que los hay?'”, explicó.
“Creo que es importante decir esto: he tenido momentos en mi vida en los que tuve tendencias increíblemente suicidas. Y creo que hay que desestigmatizar eso”, mencionó Dove.
La cantante y actriz tenía tan sólo 15 años cuando perdió a su padre, Philip Alan Hosterman, por suicidio. “Mi padre [murió por] suicidio. He hablado mucho de eso. Y siempre pienso en cuánta vergüenza y estigma hay en torno al suicidio”, dijo a la revista. Después de su muerte, la intérprete de “Boyfriend” cambió legalmente su nombre real (Chloe Celeste Hosterman) en su honor, a Dove (Paloma, en inglés), que era el apodo de su padre para ella.
La importancia de la terapia
Desde muy pequeña, Dove comenzó a lidiar con el luto, ya que su mejor amiga fue asesinada por su padre, quien luego asesinó a su otra hija para después quitarse la vida, informa Refinery29. Por lo tanto, Dove comenzó a acudir a terapia desde los 8 años.
Gracias a la terapia, Cameron aprendió a aceptar y sobrellevar las pérdidas y traumas que ha vivido. “Acepto este enorme golpe, acepto esta muerte, acepto esta pérdida, acepto esta ruptura, acepto este trauma; ahora es parte de mí. No lo rechazo, porque entonces estoy rechazando partes de mí misma”, expresó. Además, manifestó que cree firmemente que la terapia debería de ser gratuita para todos.
En 2016, Dove volvió a enfrentar la pérdida con el lamentable asesinato de la cantante Christina Grimmie, exestrella de “The Voice” a la que conoció durante una colaboración para un programa de Disney.
Tres años después su “hermano menor”, coprotagonista y amigo cercano, Cameron Boyce (que conoció durante la exitosa producción de Disney “Descendientes”), murió a los 20 años debido a un ataque epiléptico.
Ante la pérdida, muchas personas la han catalogado como “resiliente” pero Dove Cameron cree que la mejor palabra para describirla es “alquímica”, porque la alquimia nos transforma cuándo vamos logrando ser quiénes queremos ser. Se trata de convertir tus experiencias (sean buenas o malas) en algo que te hace crecer y mejorar.
“Yo era alguien que tenía todas estas experiencias en mi sistema nervioso, en mi espíritu [y] en mi sangre, y podía hacer con ellas lo que quisiera. Podría liberarlos. Podría convertirlos en algo maravilloso”, finalizó.
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