México lleva años teñido de rojo. De la sangre de víctimas por feminicidio, de la delincuencia organizada, de las desapariciones y de la impunidad. De acuerdo con un informe de la ONU, los casos de personas desaparecidas en el país rondan las 100 mil incidencias. Es una realidad alarmante que Colectiva Hilos busca visibilizar.
Mediante intervenciones y obras colectivas realizadas en espacios públicos, un grupo de artistas da vida a “manchas de sangre” bordadas, con la finalidad de reflejar la urgencia de esta problemática que diariamente alcanza a 14 familias.
Colectiva Hilos: quiénes son y cuál es su labor
La Colectiva Hilos reúne a mujeres interesadas en las problemáticas de violencia en el país comprometidas con la denuncia social a través de intervenciones artísticas. Cada una realizada por sus miembros, quienes en su mayoría se desenvuelven como artistas, gestoras, diseñadoras, sociólogas, psicólogas, fotógrafas y periodistas. Todas con un fin común; promover la denuncia social en pro de los derechos humanos, visibilizar las desapariciones y luchar por la equidad de género.
Surgió en 2020, derivada de la experiencia de Claudia Rodríguez, su fundadora, utilizando el bordado como expresión de protesta. Para ella, tejer es una actividad colectiva que invita a empatizar, a crear vínculos y da pie a la solidaridad.
Tejiendo redes
Comenzó con una donación de rafia, material que mayormente utilizan para los bordados, iniciando con un proyecto llamado “Los hilos que nos mueven”, enfocado en los apegos. Posteriormente, a la par de las crecientes cifras de violencia y desapariciones en Jalisco, se suscitó la idea de “manchar” la ciudad de rojo.
Iniciaron tejiendo en espacios públicos del estado, como el Parque Rojo, al que acudían personas atraídas por la curiosidad, que guiadas por las artistas, participaron en la creación de esta pieza que actualmente supera los 100 mil metros de perímetro.
Durante la marcha del 8M de 2020 se exhibió públicamente por primera vez reflejando explícitamente la realidad que se vive hasta el día de hoy. Poco después inició la pandemia por Covid-19, obligándolas a parar casi por completo. Ingeniaron una manera en la que se pudiera continuar a la distancia con esta labor. Establecieron un sitio en el que se entregara el material, para que cada quien le dedicara el tiempo que estuviera en sus posibilidades y así se siguió confeccionando esta pieza que ha estado presente en 12 estados de la República.
“Sangre de mi Sangre”, el bordado que pinta de rojo la realidad del país
“Sangre de mi Sangre” es un bordado kilométrico que representa tan solo un poco de la huella que las desapariciones forzadas han dejado en la historia de cada rincón del país. No se trata de metaforas o tecnicismos; lo que Colectiva Hilos hace es, literalmente, bordar, tejer y crear para no dejar olvidar a todas las personas que no están.
Hace un par de semanas tuvieron su hazaña más grande: teñir el Ángel de la Independencia o Victoria Alada, como ellas prefieren llamarla. Se trasladaron desde Guadalajara, de donde la mayor parte de integrantes proviene, hacia la Ciudad de México.
Acompañándolas llegaron familiares que han sufrido la desaparición de alguno de sus miembros. Familias completas que, pese a lo complicado que se torna sobrellevar una situación así, mantienen la esperanza de encontrar una pista, una respuesta. Algo que les diga qué fue lo que pasó, en dónde está. Una manera de hacerse presentes, de mostrar que no se han cansado de buscar.
El día que la Victoria Alada, herida, se tiñó de rojo
Esta intervención se dio en el marco del Día de los Derechos Humanos, conmemorado cada 10 de diciembre. En medio de una ciudad que nunca se detiene, que vive de prisa, pero que ese domingo encontró decenas de manos dispuestas a bordar y sumarse a la protesta.
El proyecto es autogestivo y son las artistas que lo componen las encargadas de gestionar todo lo relacionado con Colectiva Hilos. También cubren los gastos de traslado de las familias de personas desaparecidas a las concentraciones, el costo de los materiales y todos los insumos que se necesitan para efectuar una intervención de esta magnitud.
A través de su página y redes sociales oficiales comparten el paso a paso de toda nueva hazaña. Quien lo desee puede formar parte de esta causa que recibe a cualquiera que busque solidarizarse. Para quienes no les es posible hacerlo de forma física, tienen abierta la posibilidad de recibir donaciones que les permitan seguir tejiendo redes.
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