El panorama de la moda mexicana actual no estaría completo si no se mencionara entre sus principales referentes a Julia y Renata, marca fundada por las hermanas Franco hace más de 20 años en su natal Guadalajara.
Actualmente son una de las firmas con mayor presencia de la industria nacional, presentándose en múltiples ediciones de Mercedes-Benz Fashion Week y en diversos eventos internacionales, llevando a otros lugares la magia de sus diseños.
La personalidad de su marca refleja una refrescante versión del diseño mexicano, guiado por la curiosidad e intuición de las fundadoras. Cada pieza confeccionada por las tapatías es una muestra única de la libertad existente en los procesos previos para que éstas vean la luz, con equilibrio entre elegancia, sofistificación y contemporaneidad.
Nosotras te contamos más sobre ellas.
De un pequeño taller a desfiles en Fashion Week
Su historia como diseñadoras comenzó antes de que ellas lo supieran, dentro de la habitación que compartían cuando eran niñas, donde de la complicidad de hermanas nació un proyecto que les cambiaría la vida años más tarde.
Julia es tres años mayor que Renata, y fue la primera en ingresar al Centro de Diseño de Modas, institución de la que ambas son egresadas. Durante este período le dieron forma a sus ideas, mientras pasaban horas en un pequeño taller acondicionado para sus tareas y, con la libertad que hasta el día de hoy las caracteriza, crearon sus primeros diseños.
Para este punto las hermanas Franco ya tenían un poco más clara su misión de adentrarse a la industria de la moda, y pusieron en marcha lo que sería el inicio de la marca homónima que las ha llevado a ganarse un lugar, no solo en el panorama mexicano, también en ciudades como Madrid, Nueva York, Los Ángeles y Santiago.
Comunidad con la industria, un rasgo destacable de Julia y Renata
Parte importante de la historia de Julia y Renata, como diseñadoras y empresarias, ha sido su labor dentro de la industria cuestionando los procesos que involucran a artesanos de regiones originarias de México.
Desde su trinchera, las hermanas Franco procuran que cada proyecto tenga una relación justa para todas las partes involucradas. Dándoles libertad en los procesos y creando un intercambio equitativo.
El empuje a las nuevas generaciones también es un punto que la dupla tapatía tiene presente, colaborando y abriéndole las puertas a talentos emergentes. Es así como inauguraron Albergue Transitorio, un concepto que combina los bazares y el formato ‘pop up store’ en un mismo sitio, para promover y mostrar el trabajo de diferentes artistas.
Dos opuestos que funcionan a la perfección entre sí
La fusión de este par de mentes creativas con una sincronía impresionante y a la vez tan distintas entre sí, dieron como resultado un proyecto que evoluciona a través de los años a la par de sus fundadoras, quienes creen firmemente que dejarse llevar por sus instintos y hacer lo que les gusta, ha sido parte clave del éxito de Julia y Renata.
Julia posee una personalidad sensitiva y su proceso creativo consiste en plasmar sus ideas experimentando sobre lienzos, realizando el modelado en maniquís y dejándose guiar por las telas. Renata, por su parte, es audaz y se deja guiar por lo que le dicta su imaginación, para después darle vida en forma de patrones.
El carácter de cada una de integrantes de esta talentosa dupla es muy diferente, aspecto que lejos de representar un problema, se funde en una combinación casi tan armónica como sus diseños, los cuales se caracterizan por evocar la cotidianidad de las cosas visto desde una perspectiva geométrica.
Renata Franco considera que la naturalidad con la que fluye todo entre ellas representa parte importante de la esencia de su marca homónima, pues aunque cada una tiene sus propios procesos, al final el resultado se mimetiza en uno solo para darle vida a las colecciones de Julia y Renata.
“Me da miedo cuando pensamos en cosas porque suceden”, concluye Renata Franco.