En la inmensa cantidad de tendencias que todos los días dan de qué hablar en redes sociales, hay algunas que deberían llegar para quedarse en nuestras vidas. Es el caso de los microfeminismos, de los cuales NOSOTRAS te hablaremos hoy.
¿Alguna vez te has cuestionado por qué se suele asumir que quien tiene una posición de poder en una empresa es hombre? O, estando con tu novio en una tienda, ¿te ha pasado que el vendedor parece dirigirse directamente a él y te deja en segundo plano?
Este trend de redes sociales pretende desafiar dichas conductas.
Qué son los microfeminismos
El microfeminismo es un término que se ha popularizado en redes sociales, especialmente TikTok, en el último mes. Se refiere a hacer cualquier gesto o acción, por mínima que sea, para fomentar la equidad, dejar atrás los estereotipos de género o visibilizar la discriminación por este motivo.
Quienes han vuelto viral la tendencia argumentan que a partir de los cambios diminutos podemos comenzar a insertar cambios significativos en nuestra sociedad.
No es que se busque ignorar las luchas del feminismo a gran escala, como eliminar la violencia de género, el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos o cerrar la brecha salarial. En cambio, los microfeminismos pretenden que el feminismo forme parte de nuestra vida diaria en ámbitos como la oficina.
Ejemplos de microfeminismos
Una de las primeras creadoras de contenido que utilizó este término recientemente fue la productora estadounidense Ashley Chaney, quien ha trabajado en proyectos de empresas como National Geographic, Warner Bros y MTV.
“Mi forma favorita de microfeminismo es que cuando envío un correo electrónico, digamos que al CEO y su asistente, si la asistente es mujer siempre pongo antes su dirección de correo que la del CEO”, cuenta Chaney en el video. “Probablemente nadie se da cuenta, pero me hace sentir como que ‘te veo’”.
La abogada Katie Wood es otra de las personas que ha compartido en TikTok las maneras en que recurre al microfeminismo en su trabajo de oficina. Cuando necesita pedir que la contacten con una figura de poder en una empresa, Wood pregunta usando pronombres femeninos, asumiendo que la figura de poder es mujer.
También ha compartido que, si tiene que enviar un correo electrónico a una pareja, siempre nombra a la mujer primero (cambiando una costumbre que se replica generalmente, en la que te diriges primero al hombre).
De esta manera han surgido muchos testimonios, como el que comparte la usuaria Ashley Dutsch. Ella solía trabajar en una oficina del gobierno estadounidense y lidiaba con relaciones parentales; cuando los padres de un menor eran mujer y hombre, se dirigía a la mujer directamente, se encargaba de sus documentos antes y recolectaba su firma primero.
Otro ejemplo de microfeminismo que compartió Ashley Dutsch es que, cuando en una situación social va a presentar a una pareja, habla primero de la mujer y luego del hombre en relación a ella (“él es John, esposo de…”).
Básicamente se trata de aprovechar cada oportunidad, aunque resulte diminuta, para fomentar la sociedad que queremos.
Foto principal: Imagen de freepik
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