La lasagna es uno de los platillos más característicos y amados de la cocina italiana. Actualmente existen muchísimas variantes para probar en diversos restaurantes, y también es un platillo que puedes disfrutar en casa.
Aunque sea algo laborioso, el resultado es espectacular y no esta de más poder intentarlo. Por eso y para que saques a relucir a la chef que llevas dentro, hoy te presentamos dos formas de preparar una lasagna sin horno.
Sobre la lasagna
Antes de mostrarte cómo preparar una lasagna sin horno, creemos que es importante conocer un poco de este rico platillo.
Lo primero que debes saber es que este es un clásico de la comida italiana que, de acuerdo con la Enciclopedia Británica, tiene registros en la literatura medieval poco después de que Marco Polo regresó de sus viajes por Asia. Por su etimología, se cree que el nombre viene de un tipo de pan de tiempos de Augusto, el primer emperador romano.
La lasagna o lasaña se prepara con láminas de pasta separadas entre sí con un relleno y con salsa de tomate o blanca. Existen muchas variaciones tan solo en Italia: por ejemplo, la de Nápoles tiene pequeñas albóndigas, queso ricotta y mozzarella, mientras en Génova se usa el pesto como su salsa.
Pero en la actualidad es muy diferente y se le han agregado ingredientes como la carne, queso, verduras y hasta mariscos.
Cómo preparar una lasagna sin horno
A continuación te mostramos dos recetas para preparar una lasagna sin horno, de acuerdo con los sitios web Cook Gem y Taste of Home.
Receta 1
Ingredientes
- 8 láminas de lasaña.
- 1 cebolla grande finamente picada.
- Media cucharadita de chile en polvo.
- 4 dientes de ajo prensados y picados finamente.
- Medio kilo de carne molida.
- Medio kilo de salchicha italiana.
- Media cucharadita de orégano seco.
- Media cucharadita de mejorana seca.
- Media cucharadita de perejil seco.
- Media cucharadita de pimentón.
- 1 cucharadita de pimienta negra molida.
- 1 cucharadita de sal.
- 1 lata de pasta de tomate.
- 1 cucharada de azúcar.
- 1 taza de queso ricotta.
- 2 tazas de queso mozzarella.
- 1 huevo batido.
- 4 cucharadas de albahaca fresca finamente picada.
- 2-4 cucharadas de queso parmesano rallado.
Preparación, primera parte
Empieza cocinando las láminas de lasagna cruda durante dos o tres minutos en una olla con agua y sal. Retira, agrega agua helada a la pasta, escurre y reserva.
Pon a calentar una sartén grande a fuego medio y saltea las cebollas hasta que estén transparentes. Agrega el ajo y chile en polvo, continúa friendo hasta que las cebollas se doren y el ajo suelte un fuerte aroma.
Luego pon a freír la carne molida y mueve constantemente hasta que la carne comience a dorarse. Ahora mezcla media cucharadita de orégano, mejorana, perejil, pimentón, una cucharadita de sal y pimienta negra molida.
Revuelve bien, bájale al fuego y cocina a fuego lento sin tapar durante ocho a 12 minutos, o hasta que la carne molida esté dorada.
Después súbele al fuego y mezcla la carne de res molida, una lata de pasta de tomate y una cucharada de azúcar. Cocina sin tapar durante aproximadamente cinco minutos o hasta que la salsa espese, y reduce el fuego a bajo.
Preparación, segunda parte
Mientras la salsa se reduce aun más, mezcla el ricotta, el huevo batido y la albahaca fresca picada en un tazón o recipiente.
Pon con cuidado dos láminas de pasta hacia el fondo de la sartén.
Coloca la mayor parte de la carne y la salsa en un lado de la sartén. Distribuye un poco de la mezcla de ricotta y huevo, seguida de media taza de queso mozzarella rallado.
Ahora coloca otras dos láminas de pasta encima y extiéndelas sobre una capa de salsa con carne antes de repetir el proceso con la ricotta y la mozzarella, para crear otra capa usando aproximadamente un tercio de la mezcla, como antes.
Coloca lo último de la salsa de carne sobre la penúltima capa y luego pones las últimas láminas de pasta y esparce sobre dos o más cucharadas de queso parmesano rallado, seguido de una generosa capa de queso mozzarella.
Rocía un poco de aceite de oliva o vegetal, baja el fuego, cubre y cocina durante 15 minutos antes de quitar la tapa.
Pasado el tiempo, cocina sin tapar entre cinco a 10 minutos más, o hasta que las láminas de lasaña estén al dente y el queso se dore. Y listo.
Receta 2
Ingredientes
- Media taza de champiñones frescos en rodajas.
- Un cuarto de taza de cebolla picada.
- 1 cucharadita de aceite de canola.
- Tres cuartos de taza de salsa para espagueti.
- Media taza de tomate fresco picado.
- Un cuarto de cucharadita de albahaca seca.
- Medio cuarto de cucharadita de pimienta.
- 4 láminas de pasta.
- Media taza de queso mozzarella semidescremado rallado.
- Queso parmesano rallado.
Preparación
En una sartén grande, saltea los champiñones y la cebolla en aceite hasta que estén tiernos. Para después agregar la salsa de espagueti, el tomate, la albahaca y la pimienta.
Luego lleva a fuego lento y reduce el calor; ahora cubre y cocina a fuego lento durante 10 minutos, revolviendo ocasionalmente.
Mientras tanto, cocina las láminas de pasta y córtalas en tercios.
Agrega el queso mozzarella a la salsa; cocina a fuego lento hasta que el queso se derrita y escurre las láminas de pasta.
Para cada porción, en un plato coloca 2 cucharadas de salsa y dos láminas de pasta y repite las capas dos veces hasta terminarte la pasta; al final, espolvorea con queso parmesano.
Leer más:
Te decimos cómo preparar ramen tradicional en casa, paso a paso
Comentarios.-