Bien dice el dicho que “a caballo regalado no se le ve el colmillo”, cuyo significado es tan simple como el saber valorar los regalos que se nos hacen, sin criticarlo o menospreciarlo por cualquier motivo. También se nos dijo siempre que los obsequios son aquellos que puedan (y quieran darnos), y que quizá en algunas pocas excepciones cabía la posibilidad de hacer peticiones de regalos específicas.
Por ello es que han causado tanto revuelo las experiencias de peticiones de regalos virales que recientemente se han dado a conocer en redes sociales, donde usuarios comparten anécdotas en las que les fueron impuestas extravagantes listas de regalos como condicionantes para ser invitados a un evento.
House warming en Twitter
Uno de los casos de peticiones de regalos virales más recientes fue el de Andrea, una joven que hace algunas semanas publicó en su cuenta de Twitter el fragmento de la conversación que mantuvo con una de sus “amigas”, en la que ésta la invitaba a la inauguración de la casa donde habitaría con su pareja.
La plática parecía normal, e incluso le comentó que se trataba de una fiesta de colores, otro trend popular en TikTok, pidiéndole que le avisara qué color elegiría para apartarlo y que no se repitiera ninguno.
Todo cambió cuando la anfitriona le mencionó que tenían peticiones de regalos específicos, algo no tan fuera de lo común en ocasiones como bodas, XV años o festejos parecidos, en donde algunas personas acostumbran a establecer una mesa con las opciones de obsequios que les gustaría recibir.
Entonces, ¿qué fue lo que asombró a la usuaria y a los miles de internautas que reaccionaron a su tweet? Al parecer, lo que dejó incrédulo al mundo del internet fueron las especificaciones tan puntuales de cada objeto solicitado, que en realidad eran todos los electrodomésticos, muebles y enseres necesarios para una casa.
Por si fuera poco, extendían la posibilidad de dar el regalo en efectivo, con la condición de que la cantidad cubriera el equivalente a un mes de renta.
Las reacciones
Las reacciones no se hicieron esperar, y rápidamente la historia se viralizó, ocasionando que surgieran nuevas experiencias de quienes habían pasado por situaciones similares.
También hubo quien defendió a la anfitriona, pues consideraban algo extremo que fuera expuesta de esa manera. En tanto, la joven aclaró que se habían distanciado por problemas de dinero, por lo que no entendía por qué la invitaba, y mucho menos, por qué le habían hecho esas peticiones tan puntuales.
Más peticiones de regalos virales
Nos dimos a la tarea de recopilar un par de historias para ti, así sabrás cómo actuar si te llega a suceder y, también, aprenderás qué cosas tal vez no deberías hacer, mucho menos si eres tú quien está organizando la reunión, festejo o celebración de cualquier tipo.
1. Madrina de útiles
Una usuaria más del inmenso mundo del internet relató que a ella le había sucedido algo similar, cuando su supuesta amiga la buscó para pedirle ser madrina de útiles escolares de su hija. A la mujer le extrañó esta petición y realizó un sondeo con sus contactos para preguntar si eso existía.
Poco después fue contactada por su conocida, quien le reclamó que la expusiera, diciéndole además que solo se lo pidió a ella porque no tiene hijos y así le sería más fácil. La conversación no terminó bien y ambas fueron fijas en su postura.
Esto generó reacciones de asombro, mientras que hubo otros usuarios que aplaudieron la forma en la que abordó esta solicitud para “apadrinar” a la niña, argumentando que eso ya es “aprovecharse”.
2. Madrina de tatuajes
Un hecho insólito más se dio con la propuesta de ser “madrina de tatuajes” que recibió una tatuadora por parte de su amiga próxima a casarse. Esta solicitud tomó por sorpresa a la usuaria debido a que faltaban tan solo ochos días para el enlace.
También desconfió y decidió negarse puesto que la novia no solo quería un tatuaje para ella, sino que también solicitaba que su esposo, cuñadas y damas de honor se realizarán algo simbólico.
Pese a que la artista le explicó que no era posible lo que pedía y dándole las razones por las que debía valorar su trabajo, a cambio recibió numerosas respuestas molestas por parte de la amiga, quien le reprochaba su falta de compromiso ante la amistad.
Esta historia concluyó con ambas partes alteradas, y con buena razón, pues cada una defendía sus razones. Aunque siendo justas, la artista del tatuaje tenía todo el derecho de decir que no y molestarse por esa solicitud, lo que usuarios de internet que atestiguaron el desenlace secundaron en los comentarios.