Hacer cita para quitarse el acrílico de las uñas puede ser tedioso, sobre todo si siempre andas a las carreras. Aunque los manicuristas no suelen recomendar como primera opción hacer el procedimiento en casa por la falta de equipo necesario, existen maneras de quitar uñas acrílicas en casa.
No se requieren muchos instrumentos, pero sí un poco de paciencia y mucha precaución. Si deseas intentarlo es necesario que conozcas la mejor manera de realizar el procedimiento para así evitar que tus uñas naturales se lastimen.
¿Cómo quitar las uñas acrílicas en casa?
Quitarlas requerirá de paciencia y algunos productos que puedes encontrar fácilmente en casa o en la farmacia. Además, es necesario comprender que el proceso te llevará al menos una hora de tu día, como reconocen los expertos de Allure, por lo que es recomendable hacerlo en un momento en que puedas dedicarte exclusivamente al procedimiento.
Estos son los instrumentos que necesitas.
- Cortaúñas.
- Lima de uñas de grano grueso.
- Quitaesmalte 100% acetona.
- Vaselina.
- Bolas de algodón.
- Papel aluminio.
- Empujador de cutículas.
1. Corta y lima el acrílico tanto como sea posible
Para empezar es necesario deshacerte de la extensión de uña. Con el cortaúñas puedes cortar el exceso de longitud del acrílico. Intenta cortar la mayor cantidad de acrílico de esta manera porque, de acuerdo con los expertos de L’Oréal, “cuanto menos uña acrílica quede para trabajar, mejor”.
Posteriormente, lima la parte superior de la uña, que es la zona que cubre el acrílico. Puedes ayudarte de una lima de grano grueso para lograr un mejor resultado.
2. Prepara las cutículas
Como tu piel se expondrá a la acetona, es importante preparar las cutículas. Agrega un poco de vaselina tanto en la cutícula como en la base de las uñas y en los dedos. De esta manera ayudarás a evitar que la zona se reseque.
3. Usa acetona
Puedes hacer este paso de dos maneras diferentes. La primera es sumergiendo las uñas en un recipiente con acetona. Sin embargo, de acuerdo a lo mencionado por Savannah Walker, manicurista profesional en Good Housekeeping, es un método “muy agresivo con la piel y lleva más tiempo”.
Por esta última razón se recomienda el método del aluminio. Consiste empapar un algodón con acetona y colocarlo sobre la uña; luego, envolver el algodón y el dedo con papel aluminio. Tendrás que repetir el procedimiento con cada uña y dejar actuar por aproximadamente 20 minutos mientras hace efecto.
La nail artist Kristin Gyimah, para Allure, recomienda apretarlas para un mejor ajuste. “Debe gotear un poco de acetona cuando la aprietes; así sabrás que tienes suficiente en la bolita de algodón”, menciona.
4. Raspa o empuja los restos del acrílico
Después de remojar las uñas con acetona podrás notar que se han ablandado lo suficiente para poder retirarlas. Puedes ayudarte de un empujador de cutículas para un mejor resultado. Hazlo empujando desde las cutículas hacia fuera para no dañar tus manos.
Para este punto remover el acrílico no requeriría de fuerza, si cuesta trabajo puedes ayudarte de una lima o aplicar nuevamente un poco de acetona y dejar actuar.
5. Protege y dale forma a tus uñas
Una vez que hayas terminado será necesario darle forma nuevamente a las uñas para que continúen creciendo de manera regular. Usa el cortaúñas o la lima para emparejarlas. Posteriormente, es recomendable lavar tus manos, eliminar los restos del acrílico y la acetona.
Procede a hidratarlas con aceites para uñas, fortalecedores o tratamientos que las refuercen. Hidrata también tus manos para asegurarte de que tus dedos y cutículas no se resequen después de haberse expuesto a la acetona.
Foto principal: Imagen de freepik
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