Existen múltiples factores que pueden explicar por qué se quiebran las uñas con facilidad. Algunas de ellas están relacionadas con enfermedades o padecimientos, mientras que otras son resultado de hábitos de cuidado y el entorno, que impiden lucir manos con siluetas largas.
Te contamos por qué se quiebran las uñas y cómo hacerlas más resistentes.
Por qué se quiebran las uñas
Medline Plus sugiere que una de las causas principales suele darse de forma natural como resultado del envejecimiento y pérdida de calcio, así como por influencia de padecimientos específicos, tales como la anemia.
Asimismo, también puede deberse a una condición que no esté ligada con enfermedades o deficiencias de vitaminas, sino que se trate de una característica propia de la persona, al igual que alguien que tiene el pelo delgado, por ejemplo.
Otras afecciones que se relacionan con el quiebre prematuro de las uñas son daños hepáticos, hipotiroidismo y condiciones cardiosvasculares; sin embargo, requieren de un diagnóstico preciso y atención oportuna, además de que vienen enlazados a otro tipo de síntomas.
Las causas que no están relacionadas con enfermedades, responden a malos hábitos o costumbres que dañan las uñas. La Clínica Mayo menciona que intervienen el uso de esmaltes, acetonas, movimientos bruscos, cambios de terperatura o contacto frecuente con químicos, ocurrida generalmente al momento de lavar trastes, ropa o hacer otro tipo de limpieza.
Cómo hacer que las uñas sean más resistentes
1. Realiza una manicura adecuada. Procura que cada corte y limado de uñas sea uniforme y no deje lugar a fracturas al roce con cualquier superficie. Aplica un baño de esmalte transparente si sueles tener problemas de fragilidad.
2. Aplica tratamientos que fortalezcan. El portal de ISDIN sugiere que, además de dar un descanso de productos a las uñas, aplicar sustancias que las fortalezcan y nutran es una de las alternativas más fáciles para acelerar su crecimiento y volverlas más sanas. Los ingredientes dependen de tu organismo y necesidades, aunque por excelencia el colágeno, el calcio y la vitamina D son las indicadas.
3. Cuida los productos a los que te expones. Tanto para tu piel como para las uñas, procura que los detergentes, químicos y cualquier producto en general que esté en contacto directo con tus uñas sea lo menos agresivo posible. Recuerda que es un factor que podría explicar por qué se te quiebran con tanta facilidad.
4. No abuses de acrílicos y esmaltes. Las uñas esculturales se ven increíbles y mucho más si llevan colores vibrantes; sin embargo, pueden que no sean siempre lo mejor para mantenerlas sanas y, por ende, propiciar su crecimiento. Aplícalas periódicamente con descansos, para que no se debiliten tras cada puesta; en caso de que no puedas, hazlo siempre con productos de calidad y con ayuda de expertas que sepan los cuidados necesarios para “blindar” tus uñas.
Sigue leyendo: Ideas para hacerte un manicure francés ‘al revés’