Yo ya en “señora loca” tengo miedo de la tecnología… de que veo todo lo que la tecnología esta generando en el mundo y la sociedad y me asusto. El otro día leía un artículo sobre inteligencia artificial (IA) y realidad aumentada (RA) y se me pararon los pelos de punta.

Básicamente RA es la integración de la información digital con el ambiente real del usuario en tiempo real también. A diferencia se la realidad virtual, que crea ambientes totalmente artificiales, los usuarios de RA experimentan con la realidad y la información perceptual sobre ella: un concepto súper loco desde mi punto de vista y que en un momento nos hará durar de qué existe y qué es artificial, hasta dónde llegará el ser y existir conceptos que nos hemos cuestionado desde hace mucho y que hoy toman una dimensión distinta.

Inteligencia artificial y moda

Leía sobre el poder de la IA y cómo definitivamente va a reemplazar el trabajo humano; inclusive lo creativo, ya que la inteligencia artificial, a diferencia de las máquinas que hacen actividades rutinarias y “simples”, sí es creativa, puede variar y adaptarse.

Veía una editorial de moda generada por inteligencia artificial y me quería morir de estrés; o sea, básicamente con la facilidad y rapidez del rayo reemplazo un equipo creativo de mínimo ocho personas entre fotógrafo, modelo, asistente, maquillista, estilista, etc. Eso, sin contar la cadena de producción detrás de la ropa y los espacios, se me pone la piel chinita solo de pensar que en breve nos reemplazarán máquinas. No nos vayamos tan lejos, esta columna podría haber sido escrita por la IA y ustedes podrían no saberlo.

El futuro de la realidad aumentada

Uno de los estudios realizados por Deloitte arrojó que casi el 75% de los usuarios de teléfonos inteligentes serán usuarios frecuentes de RA en el 2025.

De hecho, las cifras arrojan que una buena experiencia de RA aumenta hasta en 94% la compra y su conversión. Este tipo de mecanismos mejoran el ‘engagement’ además de que implementar este tipo de estrategia reduce las devoluciones y cancelaciones de compras hasta en un 66%.

Suena como una súper estrategia de venta además de mejorar las eficiencias. Pero, desde mi punto de vista, aunque todo esto suena maravilloso hay una delgada línea entre esto y estirar la liga hasta que el consumidor final no quiera invertir en realidad y entonces prefiera vivir en un mundo virtual.

Si las cosas han cambiado dramáticamente los ultimos 10 años gracias al internet y las redes sociales este tren de las realidades alternativas ya nadie lo para. ¿Han escuchado del término metaverso? O bueno, ya estamos ahí.

Con cariño,
Gina

Gina Ortega