Cómo y cuándo lavar las brochas para maquillaje sin maltratarlas

Lavar tus brochas

Sabemos que una piel radiante requiere de cuidados específicos, como buenos hábitos, una rutina de skincare adecuada a sus necesidades y la elección correcta de productos aplicados. No obstante, hay aspectos que suelen quedar en segundo plano, tan simples como el lavar tus brochas para maquillaje y en general, cualquier herramienta que entre en contacto directo con nuestra dermis.

Por lo que de nada servirá que utilices el makeup más costoso o brochas de uso profesional si no les das el mantenimiento necesario. Te decimos cómo y cuándo lavarlas sin maltratarlas.

La importancia de tener cuidado con tus brochas

Limpiar periódicamente brochas, esponjas y herramientas utilizadas en tu rutina de maquillaje diario es un paso fundamental para mantener tu piel sana, evitar contaminación cruzada y efectos secundarios como espinillas, granitos o infecciones.

Recuerda que debido a que tocan tu piel es muy importante que tengas cuidado tanto con su limpieza como con el almacenamiento que les das. Es decir, así como no dejarías tu rímel destapado en el sol, no deberías hacerlo tampoco con las brochas.

Cómo lavar tus brochas para maquillaje

-Retira residuos tanto como sea posible. Al terminar de maquillarte, procura no dejar tus brochas llenas de producto. Esto puede desgastarlas prematuramente debido a que las fórmulas se concentran y endurecen, creando una especie de costra que será complicado retirar.

-Utiliza agua con la temperatura adecuada. Dependiendo del tipo de material del que estén hechas las fibras, lo ideal es utilizar agua templada, o sea, ni muy fría ni demasiado caliente. De esta manera disminuirás las posibilidades de que se maltraten, deformen o pierdan su funcionalidad.

En casos puntuales, recurre a agua tibia. En ocasiones especiales, el agua tibia será la mejor alternativa para eliminar todo rastro de maquillaje en tus brochas. Generalmente aplica en aquellas utilizadas para productos líquidos, como base o blush en crema, que con temperaturas bajas no salen del todo.

Busca un jabón suave. Piensa que las brochas, esponjas y cepillos están fabricados con materiales especiales y, por lo tanto, necesitan atención puntual. Todos los cuidados con ellas serán inútiles si te olvidas de algo tan importante como utilizar el jabón adecuado.

No tiene que ser estrictamente uno especial para brochas, pero sí al menos alguno que no las maltrate o destruya. Limpiarlas con jabón para trastes, por ejemplo, es un atentado directo. En ese caso, trata de hacerlo con uno de tipo alergénico o incluso con tu shampoo.

Hazlo con tus dedos. Al ser de materiales delicados, no es una buena idea que las metas a la lavadora o lo hagas con mucha fuerza, pues podrías romperlas o deformarlas. Usa las yemas de tus dedos como si estuvieras masajeándolas. Para algunas puedes usar los tapetes con relieve especiales para lavar brochas.

Enjuaga a la perfección. Una vez que las lavaste y te aseguraste de eliminar cualquier residuo de maquillaje, prosigue a enjuagarlas perfectamente bien. De ser necesario, repítelo dos o más veces hasta que no salgan burbujas, ya que esto también podría influir en su deterioro o causarte irritaciones.

Déjalas secar antes de usar. El paso final luego de limpiarlas y eliminar rastros de jabón, es dejarlas secar. Lo ideal es retirar exceso de agua con una toalla o paño suave (cuida que no desprenda pelusas) y posteriormente permitir que este proceso se realice de forma natural o al aire libre, ya que la fricción igualmente es perjudicial y favorece que se maltraten.

Es indispensable que no te olvides de lavar tus brochas periódicamente. Foto: Pexels

Mantén tus brochas en perfecto estado

La clínica estética MED menciona que entre los motivos a tomar en cuenta antes de lavar las brochas para maquillaje, se encuentra que de no hacerlo, la acumulación de polvo, suciedad y otros factores contaminantes permite que se adhieran a tus productos. Este proceso sucede a través de las brochas, esponjas y cepillos que utilices en tu makeup.

En cuanto a cada cuándo deberías lavarlas, es un lapso en el que influye el uso que les das. El portal de L’Oréal Paris recomienda que las brochas de maquillaje para productos líquidos se laven una vez por semana; las utilizadas en compactos como polvos cada 15 días; mientras que las que utilizas para ojos y delineados se limpien mensualmente.

Por otra parte, la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (CANIPEC), sugiere lavar todas cada 15 días. Si no te es posible, nunca superar el mes sin hacerlo.

Consérvalas en un lugar fresco, seco y, de ser posible, cerrado. Así las mantendrás a salvo de que el polvo o humedad del ambiente propicien que se contaminen. Incluso si son brochas que no usas con regularidad, tendrás que lavarlas, ya que por el simple hecho de estar resguardadas una vez abiertas las hará acumular suciedad.

Recuerda almacenar tus brochas en un sitio limpio y fresco. Foto: Unplash

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¿Es malo lavarte el pelo todos los días? Aquí está tu respuesta

Lavas el pelo todos los días

Desde pequeñas nos enseñaron sobre higiene y limpieza, así como la importancia de tener un cabello sedoso y reluciente, que requería de un lavado constante y a profundidad, algo que por mucho tiempo era necesario.

Sin embargo, dicha práctica se puso en duda, pues aparentemente algunas personas han tenido resultados adversos a los que se esperan por lavar su pelo todos los días. Gracias a diferentes estudios, hoy en día está comprobado que lavarse el pelo todo los días puede ser dañino para este mismo, pero, ¿por qué? Aquí te decimos.

De acuerdo con el portal de salud Healthline, es muy relativo cada cuándo debemos lavarnos el cabello; es decir, es una medida de limpieza que se toma según las condiciones del pelo de cada persona. Pues hay quienes producen sebo de manera constante y, aunque no lo creas, esa grasita que sale de nuestro cuero cabelludo no necesariamente significa suciedad, pues es importante para darle brillo natural a nuestra melena.

¿Cuándo debe lavarse el pelo?

Entonces, ¿qué factores debemos de tomar en cuenta para saber si nuestro pelo está sucio y debemos lavarlo?

  • Aceite o sebo. La cantidad de sebo que produce nuestro cuero cabelludo depende de nuestra de edad, pues los niños y adultos mayores no generan la misma cantidad que aquellas personas que están en la adolescencia o tienen entre 20 y 30 años.

    A pesar de lo mencionado, no es necesario que las personas laven su pelo todos los días, sino cada tercer día.
  • Tipo de cabello. Generalmente, el pelo liso tiende a ser delgado y a cubrirse con sebo de forma más constante en comparación con el cabello rizado u ondulado, por tal motivo debe lavarse con más frecuencia.

    Por otro lado, el cabello rizado usualmente es grueso y seco, ya que la grasa del cuero cabelludo no alcanza a cubrirlo en su totalidad.
  • Sudor. El sudor es un elemento que esparce el sebo de manera más rápida sobre el cuero cabelludo, esto hace que se sienta o luzca sucio. En este caso, se puede utilizar algún champú en seco que limpia y mantiene el cabello fresco.
  • Productos para el pelo. Si se utilizan productos de belleza para el cabello con frecuencia, éstos pueden acumularse en el pelo y generar irritación, por lo que si ocupas productos de esta naturaleza, eso significa que el lavado del pelo debe ser más frecuente.

Beneficios de no lavarse el cabello diariamente

  • Reduce la posibilidad de tener caspa. La caspa es un padecimiento que ocurre debido a la resequedad y descamación del cuero cabelludo; al dosificar la cantidad de veces que lavamos nuestro cabello es más probable que el pelo mantenga su fuerza y textura suave.
  • Más vida a tu tinte. Si cuentas con una coloración en tu pelo, lo mejor es establecer cada cuándo lo lavarás, esto ayudará a mantener la intensidad de tu tinte y así no tendrás que someterlo a procesos adicionales donde utilizan químicos y otras sustancias que a la larga pueden ser dañinas para tu pelo.

Por qué no deberías hacer ‘de aguilita’ en los baños públicos

Hacer de aguilita

A prácticamente todas nos ha pasado que cuándo salimos de paseo, llega el momento que tenemos que ir al baño y no nos queda de otra que pasar a un baño público. Para muchas de nosotras es algo casi impensable sentarnos completamente en el inodoro de ese baño, y por miedo a una infección utilizamos la famosa posición “de aguilita” para hacer del baño. De hecho, seguramente a muchas nos enseñaron de niñas que ésa debíamos aplicar estando fuera de casa.

Pero, ¿sabías qué al adaptar esta posición podríamos estarnos haciendo daño? Especialistas han comentado sobre las afectaciones que puede causar ponerse de cuclillas al orinar.

Nosotras te contamos más sobre este tema.

¿Qué sucede cuando te pones “de aguilita” para hacer del baño?

Brianne Grogan, especialista en salud de la mujer, reveló en una entrevista al New York Post que el problema de agacharnos sin sentarnos sobre el inodoro al orinar, es que los músculos del piso pélvico y la cintura pélvica (los rotadores de la cadera, los glúteos, espalda y abdominales) se encuentran extremadamente tensos.

“Esta tensión de la cintura pélvica dificulta que la orina fluya con facilidad, lo que a menudo requiere que pujes ligeramente para que la orina salga rápidamente”, comentó Grogan.

La terapeuta apuntó que empujar hacia abajo para orinar con frecuencia puede contribuir al prolapso (abultamiento o caída de una parte del cuerpo) de órganos pélvicos.

Además, el estrés de tener que aguantar en esa posición, “aunque sea ligeramente por encima del asiento del inodoro, puede significar que no vacíes la vejiga correctamente”, comentó Grogan. También se aumenta el riesgo de infecciones del tracto urinario, como la cistitis.

Foto: Unsplash. Giorgio Trovato

¿Qué tan cierto es que puedes contraer gérmenes en un baño público?

La doctora Primrose Freestone, microbióloga clínica de la Universidad de Leicester, dijo para el sitio web The Conversation que, si bien la materia fecal humana puede transmitir una gran cantidad de patógenos contagiosos, es “muy poco probable” que puedas contraer algún germen al sentarte sobre el inodoro de un baño público.

“La mayoría de las enfermedades intestinales involucran la transferencia de bacterias de la mano a la boca como resultado de la contaminación fecal de las manos, los alimentos y las superficies”, comentó la doctora.

Un estudio de 2011 encontró que cuando le jalas inodoro, los microbios pueden asentarse rápidamente en un área amplia, cubriendo la tapa de éste, el piso y el soporte del papel higiénico.

Lo que sí deberías hacer, según Primrose, es evitar tocar tu celular dentro del baño, cerrar la tapa antes de jalarle y lavarte las manos inmediatamente después de salir.

La doctora, concluyó que no hay necesidad de ponerse en cuclillas sobre la taza del inodoro. De hecho, advirtió que podría causar lesiones a largo plazo o aumentar un riesgo de infección.

Aunque estés en casa, no uses el celular en el baño. Foto: iStock

¿Qué hacer en lugar de ponerte en cuclillas?

Un artículo de Wexner Medical Center de la Universidad de Ohio, recomendó algunas formas para limpiar el asiento del inodoro.

  • Puedes cubrir el asiento del inodoro o forrar el asiento del inodoro con papel higiénico.
  • Rociar en la taza algún desinfectante o llevar un paquete de toallitas antisépticas, para darle una limpiada al inodoro rápidamente.

¿Mal aliento? Estas son algunas causas y tips para combatirlo

Eliminar el mal aliento

Pese a que el mal aliento es un problema bastante común, puede causar desde vergüenza hasta ansiedad en las personas que lo padecen y poco se habla sobre sus causas. Si piensas en tips para eliminar el mal aliento, probablemente lo primero que llega a tu mente el uso de pastillas de menta o gomas de mascar. Sin embargo, esto algunas veces no es suficiente.

El mal aliento es también conocido como halitosis y aunque muchas veces se generaliza que la causa de éste es la mala higiene bucal, existen otras acciones que originan este malestar. Aquí te presentamos posibles causas de la halitosis con datos de la Clínica Mayo.

Causas del mal aliento

  • Alimentos. La descomposición de partículas de alimentos entre los dientes aumenta la cantidad de bacterias que causan mal olor. Agregando que comer ciertos alimentos pueden causar mal aliento.
  • Tabaco. Fumar provoca un olor desagradable, pero eso no es todo; existe mayor probabilidad de que las personas con hábitos de fumar tengan enfermedades en las encías, lo cual es otra fuente de mal aliento.
  • Mala higiene bucal. Al no cepillarse bien los dientes y no usar hilo dental diario, en tu boca se quedarán partículas que produzcan mal aliento, ya que se comienza a formar una capa incolora y pegajosa conocida como placa. La placa irrita las encías y provoca una infección conocida como periodontitis.
Eliminar el mal aliento
Foto: Pexels. Sora Shimazaki
  • Boca seca. La sensación de tener la boca seca constantemente, o xerostomía, implica una disminución en la producción de saliva y puede contribuir al mal aliento.

    ¿Te has preguntado por qué hay mal aliento al despertar? Esto se debe a que mientras se duerme hay una disminución de producción de saliva. Pero se puede convertir en una enfermedad crónica que causa mal aliento a todas horas.
  • Medicamentos. Esto va ligado con la causa anterior, pues algunos medicamentos causan boca seca. También existen otros que al descomponerse en el organismo liberan sustancias químicas que se transportan al aliento.
  • Infecciones en la boca. Tener mal aliento se puede presentar después de una cirugía bucal, por caries, alguna enfermedad en las encías o llagas bucales.
  • Afecciones de la boca, la nariz y la garganta. Hay algunos casos en los que se forman piedras en las amígdalas y se cubren de bacterias, lo cual produce olor. También se puede presentar mal aliento por infecciones o inflamación crónica en la nariz, los senos paranasales o la garganta.
  • Otras causas. El mal aliento también puede ser resultado de las sustancias químicas que producen enfermedades como algunos tipos de cáncer y afecciones como trastornos metabólicos. La Clínica Mayo señala también el reflujo crónico de los ácidos estomacales como una causa de mal aliento.

Aunque algunas de estas causas se pueden evitar, si el mal aliento persiste tendrás que consultar a un médico.

Cómo eliminar el mal aliento

Aquí te presentamos algunos tips para eliminar el mal aliento, los cuales recopilamos de la página de salud WebMD.

1. Cepíllate y usa hilo dental

Cepillarnos adecuadamente los dientes y al menos dos veces al día, evitará que se forme placa en los dientes. Suma a tu rutina de limpieza una pasta de dientes con flúor para mejorar la salud dental.

Además, cualquier rastro de comida que se quede entre los dientes tiene que ser removido, por esa razón es importante usar hilo dental.

2. Usa enjuague bucal

Usar un enjuague bucal ayudará a eliminar bacterias. Asegúrate de que el enjuague no solo cubra el olor, sino también elimine los gérmenes en su mayoría.

3. Raspa tu lengua

Comúnmente la capa que se forma en la lengua alberga bacterias. Por ello es importante que cepilles tu lengua siempre, aunque sin aplicar demasiada fuerza para no lastimarte.

4. Evita ciertos alimentos

Aunque te cepilles los dientes después de comer ajo o cebolla, no será suficiente. Pues, de acuerdo con WebMD, Richard Price, vocero de la Asociación Dental Estadounidense, describe que las sustancias que causan sus malos olores llegan al torrente sanguíneo y viajan a los pulmones, saliendo el mal olor en tus exhalaciones.

5. Abandonar el hábito de fumar

Fumar puede dañar tus encías, manchar tus dientes y producir mal aliento.

6. Evita comer mentas

La razón es porque las bacterias causarán ácido con el azúcar de las mentas y este ácido, además de desgastar los dientes, producirá mal aliento de nuevo. Al contrario de esto, el chicle sin azúcar estimulara la saliva, que es el mecanismo de defensa contra los ácidos.

7. Mantén tus encías sanas

Si tienes dolor en las encías es probable que las tengas enfermas, pues ahí se acumulan bolsas de gérmenes. Lo más recomendable es que acudas a un periodoncista.

8. Humedece tu boca

Como ya mencionamos, producir saliva ayuda a eliminar ácidos de la boca. Si sufres de boca seca, toma constantemente agua.

9. Ve al dentista regularmente

A pesar de que se recomienda cada seis meses, es probable que si tus esfuerzos por eliminar el mal aliento no son suficientes, tendrás que visitar a tu dentista más de lo que te gustaría.

Recuerda que la salud bucal es importante ya que por la boca comienza nuestro proceso digestivo. Si no la cuidamos podemos afectar no solo nuestra autoestima, sino también nuestra alimentación y salud física.

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