¿Has escuchado hablar de los micromachismos?, ¿sabes qué son?, ¿puedes identificarlos? Estos actos pequeños siguen normalizados en nuestra vida diaria e incluso puede que NOSOTRAS mismas los sigamos obedeciendo porque se “esconden” en un chiste, un dicho o una conducta.
El término micromachismos fue propuesto por primera vez en 1991 por Luis Bonino Méndez (psicoterapeuta y experto en problemáticas de la condición masculina, quien desarrolla actividades en los ámbitos de la salud mental y las cuestiones de género desde hace 40 años) para definir a las prácticas “sutiles” de control y abuso de género.
“Pequeños, casi imperceptibles controles y abusos de poder cuasinormalizados que los varones ejecutan permanentemente. Son hábiles artes de dominio, maniobras y estrategias que, sin ser muy notables, restringen y violentan insidiosa y reiteradamente el poder personal, la autonomía y el equilibrio psíquico de las mujeres, atentando además contra la democratización de las relaciones. Dada su invisibilidad se ejercen generalmente con total impunidad”, los define.
“Las mujeres no deben…” completa la frase con lo que quieras, eso es un micromachismo que nos repiten una y otra vez y algunas lo creemos, entonces obedecemos a pesar de estar limitando nuestra libertad sólo por nuestro género.
Ejemplos de micromachismos
A continuación te enlistaré los más comunes, palomea los que están presentes en tu vida y no te habías dado cuenta y te aseguro que serán al menos 5:
- El rosa es para las niñas y el azul para los niños.
- Agradecer cuando el hombre ayuda en la casa.
- Los hombres son los que deben pagar la cuenta.
- No existe la amistad entre un hombre y una mujer.
- Los hombres no lloran, sólo las mujeres.
- Calladita te ves más bonita.
- Las mujeres deben cerrar las piernas al sentarse.
- Priorizar el éxito profesional del hombre sobre el de la mujer.
- Manejas como mujer.
- Todas las viejas son iguales.
- Limitar la forma de vestir por provocativa / Tú lo provocaste por tu forma de vestir.
- Que el hombre siempre busque ganar más que la mujer.
- El hombre debe enseñarle a la mujer.
- Las niñas son princesas.
- Deberías ser más femenina.
- Consíguete un novio, estás muy amargada.
- Eres la mujercita de la casa.
- Es una mujerzuela.
- Los hombres no cambian pañales, por lo tanto solamente en los baños de las mujeres hay compartimentos para hacerlo.
- Criticar a las mujeres que no se depilan el vello corporal.
- Las muñecas son para las niñas y los coches para los niños.
- Los hombres no se pintan las uñas.
- Eres una histérica.
- Ya no es señorita.
- Así no se comporta una dama.
- No vas a poder o no vas a entender, es cosa de hombres.
Como te puedes dar cuenta, los micromachismos son desde frases hasta acciones o condicionamientos que NOSOTRAS mismas debemos derribar porque también son una forma de desigualdad de género, aunque sean “pequeños”.
Biológicamente nacimos distintos, pero todos somos seres humanos (no importa el género, incluso actualmente que se están reconociendo más de dos) y por ello debemos tener los mismos derechos y las mismas oportunidades. ¡TODOS SOMOS SERES HUMANOS!
¿Sabías qué…? La violencia cometida en contra de las mujeres y las niñas es la violación a los derechos humanos más recurrente en todo el mundo.