La flor de nochebuena es uno de los primeros indicativos de que la Navidad está por llegar. Esta planta originaria de México y cultivada en partes específicas del mundo puede ser reconocida a primera vista por el intenso color rojo de sus hojas y la forma que pareciera semejar a una estrella.
Durante la época navideña es habitual verla en los hogares y jardines como decoración. Y aunque no es tóxica ni resulta peligrosa para los humanos ni el ambiente, para las mascotas, especialmente perros y gatos, sí lo es.
Estos son los motivos por los que debes mantener a tu “lomito” lejos de las Nochebuenas.
¿Es cierto que las Nochebuenas son peligrosas para los perros?
Los perros suelen ser muy curiosos con las cosas de su entorno y, considerando que su olfato es el sentido que tienen más desarrollado, es normal que sientan la necesidad de inspeccionar todo lo que ven a su paso. Seguramente has visto a tu perro o gato oler algo y, enseguida, llevárselo al hocico. Lo que se debe a que se guían exclusivamente de los aromas antes de probar cualquier cosa.
Y, aunque es una característica de la especie, es indispensable vigilar qué es lo que tienen al alcance, para evitar accidentes e intoxicaciones. Usualmente se le presta atención a mantener a las mascotas en general alejadas de detergentes, químicos e ingredientes que por default se conoce que son malos para ellos, pero hay objetos que pasan desapercibidos y podrían resultar peligrosos si llegaran a ser consumidos por los animales.
Tal es el caso de la flor de nochebuena, una planta conocida como “símbolo de la Navidad”, la cual podría ocasionarle a tus adoradas mascotas un episodio de intoxicación y reacciones que le harán pasar un mal rato.
Por qué la flor de nochebuena es tóxica para las mascotas
De acuerdo con EFE, la flor de Nochebuena y el muérdago, ambas plantas típicas de las fiestas navideñas, resultan perjudiciales para los animales de compañía, especialmente perros y gatos.
Esto es ocasionado por su contenido de compuestos con efectos venenosos y tóxicos, como la savia de la flor, que es el líquido blanco de apariencia similar a la leche que desprende cuando se rompen sus hojas.
La fundación Súper Cachorros menciona que el principio activo de las nochebuenas es semejante al empleado para producir látex y caucho, lo que reitera por qué no es amigable con los animales.
Portales como Holidog Times aclaran que no es muy usual que esto desencadene en una situación fatídica. Los más propensos son cachorros, animales gerontes, aquellos que presenten signos de deshidratación y cualquier perro o gato que tenga heridas cutáneas expuestas. Ya que éstas aceleran la absorción de las toxinas, indica Experto Animal.
La página especializada Bunko.pet señala que su nivel de toxicidad es baja. Por lo que, para que un perro o gato resultara envenenado, tendría que consumir al menos 500 hojas. No obstante, esto depende de tu mascota, raza, tamaño y condiciones especiales.
Qué hacer en caso de que las consuman
Los primeros síntomas de una intoxicación por consumir flor de nochebuena en perros y gatos son salivación excesiva, vómito y diarrea, ocasionándoles malestar general. En casos específicos se presentan irritaciones de la piel, conjuntivitis y convulsiones.
Si sospechas que alguna de tus mascotas ingirió la planta, trata de corroborar la cantidad que se comió. Afortunadamente, si fue poco en comparación a su tamaño, es posible que no tenga reacciones de importancia, aunque aun así es indispensable que vigiles su comportamiento.
De ser una porción considerable, no te confíes a remedios caseros. Lo mejor será acudir a una veterinaria lo más pronto posible; ahí podrá ser evaluado y se le dará la atención necesaria. Sigue el tratamiento indicado y, ahora más que nunca, cerciórate de que al menos los días siguientes no esté ninguna de estas plantas o macetas cerca.
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