Todas hemos escuchado alguna vez mitos sobre el autismo que seguramente nos dejaron con una sensación de miedo o incomodidad. También existen preconcepciones que incluso forman parte de la cultura popular en forma de comedia.
Sin embargo, es importante aclarar que muchas de estas declaraciones se hacen desde el prejuicio y la ignorancia, por lo que resulta vital eliminarlos para estar mejor informadas y respetar a las personas con autismo.
Mitos que generan discriminación y estigma sobre las personas con autismo
Los trastornos del espectro autista (TEA) son un grupo de afecciones diversas, explica la Organización Mundial de la Salud; se caracterizan por algún grado de dificultad en la interacción social y la comunicación, además de patrones atípicos de comportamiento.
El autismo o espectro autista, según la revista Nature, se manifiesta como un desarrollo conductual distinto y se comienza a presentar desde los 2 ó 3 años de edad, aunque comúnmente es diagnosticado mucho después. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, uno de cada 100 infantes nace con uno de estos trastornos y a lo largo de su vida puede presentar algunas otras afecciones como pueden ser epilepsia, depresión, ansiedad, hiperactividad, insomnio y autolesiones.
Las personas con autismo viven y perciben el mundo de manera diferente a nosotras, pero solo necesitan que este sea adaptable a ellas y que no se les excluya de él.
1. Las personas con autismo son violentas
La percepción de la realidad de las personas con autismo es diferente, tienen dificultad para comprender algunos aspectos o emociones y para expresarse. Cuando llegan a ser agresivas se debe principalmente a que están frente a una situación que no comprenden, por lo que la recomendación de UNICEF es observarlas y tratar de conocerlas mejor.
2. El espectro autista te vuelve inteligente
Todas las personas tenemos un desarrollo distinto según nuestras características individuales y nuestra historia. La inteligencia de una persona con autismo, al igual que cualquiera de nosotras, será proporcional a su educación y contexto.
Todas las personas, independientemente de que tengamos un trastorno del espectro autista o no, somos diferentes y poseemos tanto fortalezas como debilidades.
3. Cuando eres una persona con autismo no te puedes enamorar ni te interesa el sexo
Ser una persona con autismo no te separa de el deseo sexual humano; si bien puedes identificarte como personas de la comunidad LGBT como las demás o ser asexual, tener autismo no es sinónimo de ser asexual.
Al contrario, Autism Parenting Magazine señala que las personas con autismo desde su adolescencia tienen curiosidad, deseo sexual y romántico. Por supuesto tienen diferentes formas de experimentarlo y expresarlo debido a su sensibilidad sensorial potenciada o debilitada según la persona.
4. La independencia es imposible cuando tienes autismo
En Autism Speak admiten que es cierto que cuando tienes autismo necesitas de cierto tipo de apoyos en tu vida; sin embargo son cada vez más las personas con autismo que alcanzan su independencia y ésta puede desarrollarse de mejor manera si desde que son pequeñas sus madres y padres les impulsan a construirla, desarrollarla y aumentarla por medio de comunicación, enseñanza de autocuidado, límites, tareas del hogar, habilidades de seguridad pública, habilidades de ocio y competencias profesionales.
5. Las personas con autismo son antisociales
Contrario a lo que se cree, de acuerdo con Indiana University Bloomington, las personas con autismo tienen un genuino interés por involucrarse e interactuar pero no cuentan con las habilidades típicas para hacerlo. Algunas de sus sugerencias para convivir de mejor forma con estas personas son: propiciar un ambiente físico y social adecuado, además de expresar las emociones de manera explícita.
Las personas con autismo merecen y tienen el derecho a ser incluidas en la sociedad, y como cualquier persona neurodivergente o con discapacidad necesitan una transformación del contexto para poder desarrollarse. Fomentemos el cambio.