Efecto Batman, ¿por qué es bueno tener un alter ego en el trabajo?

Todos los días experimentamos diferentes retos en el trabajo. Hay días en que todo parece fluir muy bien, pero en otros nos bloqueamos y pensamos que no seremos capaces de resolver tal cosa o no dejamos de procrastinar en otra. Según algunos especialistas, un secreto para obtener mejores resultados es tener un alter ego. Sí, leíste bien. Descubre qué es el Efecto Batman.

Según estudios, distanciarte de tu personalidad puede ayudarte a manejar de mejor manera tus emociones y respuestas ante ciertas situaciones que te cuesta trabajo afrontar.

Efecto Batman, ¿por qué es bueno tener un alter ego en el trabajo?

Se le llama Efecto Batman, según SE Magazines, a la práctica de adoptar un alter ego (una personalidad “alternativa”) para ayudar a superar la ansiedad, aumentar la confianza y estar preparada para afrontar alguna situación desafiante. Básicamente, es adoptar un personaje.

Este secreto, dice la BBC, lo han usado grandes artistas como Beyoncé o Adele, quienes han experimentado ansiedad o miedo al escenario a pesar de estar entre las cantantes más reconocidas a nivel internacional.

En la década de los dosmil Beyoncé creó a “Sasha Fierce”, un personaje en quien podía “convertirse” la cantante porque no era tan nerviosa como ella. Este alter ego le permitió actuar con confianza y sensualidad cambiando su postura y hasta forma de hablar.

Pero esta idea de tener un alter ego no solo puede ser usado por grandes estrellas, pues la estrategia psicológica puede ser aplicable para situaciones en la vida real.

Adoptar un alter ego es una forma de autodistanciamiento que implica apartar nuestros sentimientos inmediatos para ver de forma objetiva la situación a la que nos enfrentamos, según indicó Rachel White, profesora del Hamilton College de Estados Unidos, a la BBC. Esto ayuda a la ansiedad, mejora nuestra actitud ante tareas desafiantes y aumenta nuestro autocontrol.

Puedes aplicar el efecto Batman cuando te da nervios tener una presentación importante, cuando te da ansiedad social convivir con personas con las que tienes que conversar o durante alguna situación en la que, simplemente, necesitas controlar tus emociones para permitirte ver más claramente.

Funciona en todas las edades

Para un estudio que se publicó en Child Development, en el cual participó la doctora Rachel White, se realizó un experimento sobre la perseverancia en niños pequeños a partir de adoptar una perspectiva externa de una situación propia (es decir, actuar como si fueran alguien más).

El experimento se aplicó en niños de 4 y 6 años. A cada uno, por separado, se le pidió realizar una tarea monótona en una computadora por 10 minutos; se le dijo que, cuando quisiera descansar, podía cambiarse de lugar para disfrutar un juego muy atractivo en una tableta. Para algunos de los niños hubo una instrucción adicional: pensar en sí mismos como si fueran un personaje (les dieron varias opciones, entre ellas Batman) y proceder como lo haría el personaje.

Sin importar la edad, los niños que actuaron como un personaje pasaron más tiempo “trabajando” que quienes actuaban como sí mismos.

Foto: pexels. andrea piacquadio

Cómo lograrlo

Para lograr el efecto Batman, la doctora White sugiere elegir a una persona diferente para diferentes tipos de objetivos. La práctica debería crear un espacio psicológico alejado de sentimientos que puedan distraernos, al mismo tiempo que nos recuerda los comportamientos que queremos alcanzar.

Ya sea que nos pongamos en el lugar de un amigo, una figura de la cultura pop o la propia Beyoncé, con un poco de imaginación podremos acercarnos un poco más a la persona que deseamos convertirnos en ciertas circunstancias.

Como en diversos experimentos, se aconsejó que los participantes pensaran en sus emociones sobre una situación desafiante utilizando la tercera persona (por ejemplo, “Andrea siente…”), como si fueran una entidad separada, en lugar de la primera persona (“Yo siento”).

Y tú, ¿conocías el efecto Batman?

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