Mientras hay quienes pueden traer cambios positivos que contribuyen a tu bienestar, también existe gente que puede ser todo lo contrario. Se trata de las personas tóxicas, cuyo comportamiento puede afectar el bienestar de quienes les rodean. Pero, ¿qué es una persona tóxica?
No estamos hablando de vibras, sino de quienes tienen actitudes y comportamientos que dañan a los demás, a corto o largo plazo.
Conocer cómo actúan las personas tóxicas puede ser fundamental para tomar medidas que permitan proteger tu bienestar mental. De esta manera, podrías conseguir identificar sus comportamientos y establecer medidas adecuadas y límites que no les permita comprometer tu salud emocional.
¿Qué es una ‘persona tóxica’?
Una persona tóxica puede definirse por ser alguien que tiene conductas dañinas e impacta de manera negativa a quienes le rodean, como explica Psychology Today. Este tipo de personas pueden causar muchos conflictos, estrés, dolor emocional o, en algunos casos, también dolor físico.
Una persona tóxica muchas veces podrá ser descrita como egocéntrica, manipuladora, abusiva o carente de empatía. Suele enmascarar sus comportamientos y rasgos negativos con comportamientos amigables. Algunas conductas y técnicas que tienen las personas tóxicas pueden incluir el gaslighting, las acciones pasivo-agresivas y el ‘love bombing’, tan solo por mencionar ejemplos.
Este término no es una condición médica diagnosticable, pero los rasgos o comportamientos de una persona tóxica sí pueden presentarse como parte de algunas condiciones que sí pueden diagnosticarse, como el trastorno de personalidad narcisista.
Muchas veces, una persona tóxica es capaz de hacer creer a otros que nada es culpa suya y que siempre hay alguien más a quien culpar. Este tipo de personas se centran continuamente en ejercer el papel de “víctima” y, con ello, manipular a otros para obtener lo que necesitan, como explica el sitio Integrated Way.
Rasgos de una persona tóxica
La plataforma médica WebMD menciona que el comportamiento de las personas tóxicas comprende algunos rasgos comunes.
1. Inconsistencia
Una persona tóxica no suele ser constante. Su comportamiento puede ser errático e impredecible con sus compromisos y promesas. Nunca sabrás lo que hará ni como impactará en ti ese comportamiento porque las personas tóxicas no suelen respetar las emociones de otros.
2. Necesitan atención
Otro rasgo es que siempre intentan mantener la atención en sí mismos. Siempre buscarán un apoyo emocional, pero no lo devolverán de la misma manera. Este comportamiento se asocia comúnmente con el trastorno de personalidad narcisista.
3. Agotan emocionalmente
Las personas tóxicas pueden drenar tu energía para disfrutar de los buenos momentos juntos. De acuerdo con Psychology Today, muchas veces su negatividad y sus quejas constantes pueden tener un impacto negativo y no dejan espacio para interacciones positivas. La crítica constante puede desgastar la confianza en ti misma y en la relación que tengas con la persona.
4. Siempre hay drama
Las personas tóxicas pueden crear o agrandar los conflictos dentro de un grupo de gente, generando tensión y ansiedad. No les importa si generan confusión o lastiman a otros con sus acciones. Demostrar tu inconformidad con sus acciones, podría generar una respuesta negativa de su parte.
5. Manipulan para conseguir lo que quieren
Suelen manipular a las personas que les rodean para conseguir cosas específicas. No les importa mentir, distorsionar la verdad, omitir información o exagerar para lograrlo. Este tipo de abuso psicológico puede hacer que cuestiones tu cordura, aumente tu ansiedad y disminuya tu autoestima.
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