Nosotras.com.mx es el sitio femenino de EL UNIVERSAL que presenta temas de actualidad relevantes para la mujer de hoy: empoderada, segura e independiente
Categoría: Wellness
Todo lo que debes saber para llevar una vida saludable de adentro hacia afuera. Tips de expertas y expertos para equilibrar tu mente, emociones y cuerpo.
Hoy en día existe una gran variedad de métodos anticonceptivos, brindando una oportunidad única para que NOSOTRAS podamos elegir el que mejor se adapte a nuestros cuerpos y, al mismo tiempo, nos ofrezca la mayor comodidad posible. Hoy te platicamos más sobre uno de los más populares: cuáles son los tipos de DIU que existen.
El dispositivo intrauterino o DIU es un pequeño objeto en forma de “T” que se coloca en el útero a través de la vagina, por tu ginecóloga o un profesional de la salud. Su colocación es rápida, sencilla y poco dolorosa.
Aunque elegir un DIU pueda parecer sencillo a simple vista, en realidad es importante considerar las diversas características que ofrecen sus distintas presentaciones. NOSOTRAS te explicaremos los tipos de DIU que existen y las diferencias entre ellos. Recuerda que debes platicar con tu ginecóloga sobre cuál es el mejor para ti.
Cuáles son los tipos de DIU que existen
Foto: Unsplash. Reproductive Health Supplies
Actualmente existen dos tipos de dispositivos intrauterinos: el de cobre y el hormonal. Cada uno de ellos con características diferentes, que sí o sí debes saber si es que planeas usar este método anticonceptivo.
DIU hormonal
En el caso del hormonal, este dispositivo libera una hormona llamada progestina, que es como una versión sintética de la progesterona. Según el portal Medical News Today, la progestina espesa la consistencia del moco cervical, lo cual hace que los espermatozoides no puedan llegar al óvulo.
En el caso del DIU hormonal existen cuatro marcas principalmente (Mirena, Kyleena, Jaydess y Skyla), las cuales puedes encontrar en México y otros países. La diferencia entre éstas son su duración y la cantidad de hormonas liberadas. Por ejemplo, Mirena, el dispositivo más utilizado, tiene una duración de hasta ocho años.
DIU de cobre
A diferencia del hormonal, el DIU de cobre tiene una duración de hasta 10 años. Su principal característica es que no libera ninguna hormona; en cambio, este dispositivo contiene una pequeña cantidad de cobre, la cual crea un ambiente tóxico para los espermatozoides.
De igual forma, debes tener en cuenta que estos dispositivos pueden retirarse en cualquier momento, así que si llegas a tener molestias, no dudes en consultar con tu médico.
¿Qué debes tener en cuenta si decides colocarte el DIU?
El colocarse un DIU puede tener efectos secundarios, como sucede con otros métodos anticonceptivos. Debes tener en cuenta que cada cuerpo es diferente, y no va a reaccionar exactamente igual que en otras mujeres que decidieron ponerse el dispositivo.
En el caso del hormonal, tu periodo puede convertirse en irregular, incluso algunas mujeres dejan de menstruar por completo. Algunas personas reportan que el DIU hormonal les causó un aumento de peso, dolores de cabeza y acné.
Con el DIU de cobre, tu periodo puede aumentar, al igual que los cólicos.
Tessa Madden, obstetra-ginecóloga y especialista en planificación familiar, menciona que para la publicación de Yale Medicine que “es importante discutir esto porque algunas mujeres prefieren tener su periodo todos los meses. También les pregunto cómo es su periodo ahora mismo. Si una mujer ya tiene un periodo muy abundante y no le gusta, entonces un DIU de cobre podría no ser su primera opción, ya que podría hacer que su periodo sea aun más abundante”.
No olvides que lo más recomendable es consultar a tu ginecóloga, quien podrá brindarte orientación precisa sobre los diferentes métodos anticonceptivos y así recomendarte el más adecuado para ti.
La mayoría de las mujeres comienza a experimentar en algún momento de su vida aquellas pequeñas líneas moradas conocidas comúnmente como “arañitas”, que aparecen en nuestras piernas. Aunque suelen asociarse con el envejecimiento, pueden manifestarse cuando eres joven adulta. Hoy te platicamos a qué edad pueden salir las “arañitas” en las piernas.
Aunque estas venitas aparecen normalmente en las piernas, también se pueden hacer presentes en otras zonas del cuerpo, como la cara o los brazos.
Según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, las “arañas vasculares” afectan a más de la mitad de las mujeres.
Diferencia entre arañas vasculares y venas varicosas
Existe una diferencia entre las famosas “arañas” vasculares y las venas varicosas o várices. Las “arañitas” son indoloras y no sobresalen de la piel. El portal de Cleveland Clinic menciona que estas venitas, que en realidad son vasos sanguíneos dañados, parecen mucho más finas que las várices. Típicamente se ven en color rojo, morado o azul.
Por lo general no son peligrosas y existen tratamientos para combatirlas debido a su aspecto. Sin embargo, si notas su aparición es importante acudir con el médico porque pueden ser síntoma temprano de un problema de salud como la insuficiencia venosa crónica.
Las venas varicosas, en cambio, son más grandes y profundas, además que sobresalen en la piel. La diferencia más importante es que las varices suelen ser dolorosas y pueden presentar molestias en el día a día, como hinchazón, ardor, pesadez en las piernas y calambres.
A qué edad pueden salir las ‘arañitas’ en las piernas
Las “arañitas” vasculares afectan a más de la mitad de las mujeres y su aparición no es un sinónimo de vejez. Aunque es más probable que aparezcan después de los 65 años, estos pequeños vasos dilatados pueden manifestarse en mujeres de todas las edades, incluso en quienes aún no llegan a los 30 años.
La doctora Jenna Wishnew, especialista en cirugía vascular y procedimientos endovasculares, menciona para el portal Lam Vascular que “las personas que tienen arañas vasculares a los 20 años probablemente tengan una predisposición hereditaria a tenerlas”. Las ‘arañas’ vasculares presentes en personas mayores de 30 años también pueden presentarse tras un embarazo.
El Departamento de Salud de Estados Unidos menciona que, además de la edad y la predisposición genética o tendencia familiar a desarrollar “arañitas” vasculares, el sobrepeso también puede contribuir a la aparición de estas pequeñas líneas rojas.
Por otro lado, las varices pueden aparecer por diversos motivos. Además de la edad, el embarazo y la genética, permanecer sentada o de pie durante largos periodos de tiempo son factores que pueden contribuir a su desarrollo. No solo la edad es responsable de la aparición de varices.
Las primeras citas tienen el propósito de comenzar a conocer a alguien; funcionan no solo para saber si hay química sino para darte una idea del tipo de persona que tu prospecto es. Hoy en día queremos compartirte algunas red flags que pueden salir a relucir desde la primera cita; para esto debes fijarte cómo habla de su ex.
Es importante aprender a detectar las red flags que pueden aparecer en el momento. No hay mayor ejemplo de una red flag que escuchar lo que una persona tiene que decir de su ex.
Por lo general llega un punto en cualquier cita en el que invariablemente hablarán de una relación pasada. No debes temer al respecto, está bien, es normal querer saber sobre el pasado amoroso de la otra persona.
“Hay muchas razones por las que la gente habla de sus ex con nuevas parejas”, menciona Yuko Nippoda, psicoterapeuta y portavoz del Consejo de Psicoterapia del Reino Unido (UKCP) para Refinery29.
Una gran red flag es cuando la persona con la que sales habla de manera negativa sobre su ex, sobre todo si utiliza insultos, la descalifica o la retrata como “loca”. Incluso si la relación hubiera terminado por algo que hizo la otra persona, es muy importante fijarte cómo se expresa tu cita.
El sitio Glam aconseja que si no te sientes cómoda con la forma en la que tu cita habla de su ex, está bien establecer algunos límites al respecto o terminar las cosas definitivamente antes de convertirte en la próxima ex de la que hablen mal.
Cuando una persona pone toda la culpa sobre su ex de que la relación no funcionara, es como si te estuviera diciendo que tú tendrías toda la responsabilidad que todo salga bien con una nueva relación.
Si notas que tu cita no deja de hablar mal de su ex, podría ser una red flag a la que deberías de prestarle atención. Cherlyn Chong, coach de citas, para el portal Elite Daily aconseja indagar un poco y, “si es negativo, no pasaría más tiempo con esta persona, porque aún no ha seguido adelante ni ha resuelto sus problemas”.
Hablar de más o de menos de un ex durante una cita
Según declaró para Refinery29 Michaela Thomas, psicóloga clínica y autora de The Lasting Connection, “no hablar en absoluto de un ex puede sugerir que sucedió algo doloroso o que hiciste algo de lo que no estabas orgulloso; tal vez lo lastimaste o lo engañaste”.
Así que ser abiertos sobre el tema está bien para empezar a conocerse. Esto podría ser importante para definir lo que podría pasar con ustedes a futuro de una forma sana. Sin embargo, una cosa es mencionar a tu ex para comentar cómo fue tu relación pasada y otra totalmente diferente es criticar a tu ex abiertamente.
Cherlyn Chong explica que es “un problema si alguien todavía tiene sentimientos o alberga resentimiento, amargura o disgusto hacia su ex”.
Puedes mencionar tu relación pasada si sale el tema, no hay una regla que diga que no es lo correcto. Sin embargo, especialistas mencionan que es adecuado siempre que se discuta con respeto. Por ejemplo, es posible hablar acerca de la experiencia de aprendizaje que significó una relación o expresar agradecimiento por el tiempo que se compartió con la otra persona, pero dejando claro que estás lista para algo más.
En un mundo donde la presión laboral, social y personal puede resultar abrumadora, cada vez más mujeres están descubriendo el valor de una ambición silenciosa: aquella que prioriza tu salud mental por encima de cualquier otro éxito externo.
Este nuevo fenómeno ha cobrado fuerza en los últimos años, especialmente entre las jóvenes. Por eso han surgido tendencias como la de los ‘lazy girl jobs’ (“trabajos para chicas flojas”). La definición de “éxito” ya no es la misma que hace unos ayeres. En la actualidad, las personas priorizan su salud mental por encima de cualquier meta material o laboral.
Aunque podría interpretarse como una reducción en el esfuerzo dedicado a las tareas laborales, la realidad es otra. En los últimos años, ha habido un cambio en la forma en que las personas miden el éxito, muchas ya no consideran que tener el último modelo de coche, ocupar un puesto alto en el trabajo, o alcanzar cualquier meta que antes se consideraba significativa, sean indicadores válidos de éxito en la actualidad.
Ambición silenciosa: cuando lo más importante es tu salud mental
Foto: Pexels. Ray Rodriguez
Según el portal Worklife, el término de ambición silenciosa fue acuñado por Fortune, revista de negocios estadounidense. Dicha publicación menciona que la llegada de la pandemia fue un detonante de este fenómeno. Durante la cuarentena, miles de personas reevaluaron sus prioridades y establecieron nuevos objetivos, poniendo en primer plano su salud mental.
Una encuesta realizada por el portal de noticias News24, donde se evaluó a mil empleados de una empresa en Estados Unidos, menciona que solo el 37% está interesado en querer un puesto mayor. News24 preguntó por qué no tenían la ambición de llegar a ese puesto, el 91% de quienes habían respondido así mencionaron razones de estrés y presión.
¿Por qué nace una ambición silenciosa?
Foto: Pexels. Monstera Production
Las largas jornadas laborales y los sueldos bajos que distintas empresas ofrecen, son de las principales razones por la cual muchas jóvenes le han dado un giro a sus objetivos de vida. Pues muchas veces las mismas compañías crean un ambiente laboral de tensión, dejando a un lado las salud metal de sus empleados.
Dentro de la misma encuesta de News24, el 63% de los encuestados dijo “me importa hacerlo bien, pero no comprometeré mi equilibrio entre el trabajo y la vida personal.”
La búsqueda de significado y propósito en la vida, le ha dado fuerza a este término, pues ahora la mayoría busca formas de sentirse realizadas y satisfechas más allá de las métricas tradicionales de éxito, como el estatus social o el éxito profesional.
La sexualidad de las mujeres siempre ha sido un tema tabú, aunque cada vez existen más esfuerzos por desmitificarla. En el siglo pasado se difundió uno de los peores mitos con respecto a ella, y el responsable de dar a conocer esa creencia fue Sigmund Freud.
Hoy en día se sabe que su publicación “Tres ensayos sobre la teoría de la sexualidad” quedó con ideas obsoletas. Por lo que se han llevado a cabo diversos estudios para que este mito no siga afectando a las mujeres aun después de tantos años.
El mito que Freud originó
Freud todavía es reconocido como el padre del psicoanálisis, teoría y práctica de la cual también ya se ha refutado mucho. En el sistema de creencias que Freud sugiere sobre la sexualidad femenina, como explica el sitio Refinery29, propone que los orgasmos del clítoris estaban relacionados con problemas de salud mental.
La propuesta sugiere que Freud creía que estaba bien que las adolescentes se “autosexuaran” hasta alcanzar “orgasmos del clítoris”. Pero cuando la mujer se casaba, al estar con sus maridos, abandonaban este tipo de placer “inmaduro” y, si estaban mentalmente sanas, pasaban al “orgasmo vaginal”, al cual consideraba un placer “maduro”.
Es decir, para Sigmund Freud el único orgasmo “válido” era el vaginal, y se invalidaba por completo el de clítoris en mujeres adultas. De esta manera, era indispensable la presencia de un hombre en su vida sexual.
Psychology Today indica que Freud aseguraba que si las mujeres no tenían orgasmos durante el coito eran fracasos sexuales neuróticos. Concluyó que la mujer, entonces, era neurótica y frígida.
Las mujeres tenían ‘orgasmos falsos’
La consecuencia fueron cientos de mujeres con problemas de intimidad porque tenían dificultades al momento de querer alcanzar el clímax con su pareja en el acto sexual. Al notar que estos problemas no los tenían al masturbarse, se les hizo pensar que sus orgasmos entonces no eran reales, menciona la BBC.
Para 1968 la estadounidense Anne Koedt, en su artículo “El mito del orgasmo vaginal”, postuló la idea de que la alta tasa de “frigidez femenina” de la que hablaba Freud era más bien una alta tasa de ignorancia de los hombres en el tema.
Foto: Pexels. Deon Black
Ahora sabemos que Freud NO tenía razón
Con el paso del tiempo esta teoría se fue cuestionando. La ciencia en general y las mujeres mismas dejaron de estar convencidas sobre esa teoría.
Fue el sexólogo estadounidense Alfred Kinsey una de las primeras figuras que desafió las ideas de Freud sobre la sexualidad femenina, de acuerdo con la BBC. En los años 50, a partir de una investigación, descubrió que la mayoría de las mujeres participantes se masturbaban mediante la estimulación del clítoris; menos del 20% experimentaban con la penetración vaginal y solo porque sentían que debían hacerlo.
Desafortunadamente, las investigaciones de Kinsey fueron muy mal recibidas. Sin embargo, surgieron diversas figuras feministas como Anne Koedt.
Fueron obras como “El punto G y otros descubrimientos recientes sobre la sexualidad humana”, de Alice Kahn Ladas, Beverley Whipple y John Perry, que comenzaron a cambiar el discurso para redescubrir zonas de placer femeninas, aun cuando se tratara de estimulación vaginal.
Con el paso del tiempo se habló y estudió más el tema dejando el tabú de lado. Refinery29 menciona que han llegado estudios que, de manera “oficial”, contradicen definitivamente la teoría de Freud. Uno de esos estudios se publicó en el Journal of Sexual Medicine y en él se examinó si existe o no un vínculo entre el “tipo” de orgasmo (de clítoris y vaginal) y la salud mental.
Los resultados evidenciaron que no había evidencia de una diferencia científica entre un orgasmo de clítoris y uno vaginal. También se demostró que no había un vínculo con la salud mental.
Sin importar lo que haya pensado Freud, el placer de cada mujer se presentará de manera diferente y cada una será libre de explorarlo como más le plazca.
El índice de masa corporal (IMC) se ha utilizado durante muchos años como una medida estándar para evaluar la salud, y seguramente has escuchado sobre él muchas veces. Pero, ¿el índice de masa corporal es confiable en las mujeres como indicativo de salud?
A pesar de ser una medida médica diseñada para evaluar el estado de salud, el índice de masa corporal no siempre ofrece resultados precisos, especialmente en NOSOTRAS, las mujeres.
¿Cómo se mide el índice de masa corporal?
Foto: Pexels. Shvets
El IMC se calcula utilizando una fórmula simple en la que se divide el peso entre la altura al cuadrado. Aunque puede parecer complicado, las matemáticas son bastante básicas. Además, hay numerosos sitios web que facilitan este cálculo; solo necesitas buscar “calculadoras de IMC”.
Una vez obtenido tu resultado, debes compararlo con la tabla de IMC, que generalmente se divide en cuatro categorías: bajo peso, normal, sobrepeso y obesidad.
Sin embargo, muchas personas creen que el índice de masa corporal no debería ser una medida estándar para evaluar la salud.
“El problema no es el IMC en sí, sino la tendencia a utilizarlo como el único enfoque”, dice Wajahat Mehal, director del Programa de Pérdida de Peso y Salud Metabólica de Yale, en una entrevista con Yale Medicine. “El IMC es solo un dato, junto con muchos otros, que debe considerarse para evaluar la salud de una persona”.
El IMC no toma en cuenta aspectos como la masa muscular, la composición del cuerpo, las diferencias raciales o de sexo biológico, dijeron investigadores de la Universidad de Pensilvania en 2022, de acuerdo con Medical News Today.
El centro de investigación de la Universidad de Rochester indica que el IMC se creó en el siglo XIX por un astrónomo belga que intentaba diseñar un censo de población para Países Bajos. Su muestra se componía principalmente por hombres blancos de altos recursos.
¿El índice de masa corporal es confiable en las mujeres?
Foto: Pexels. Karolina Grabowska
En el caso de las mujeres, el IMC no siempre es exacto, explica el portal Cleveland Clinic. Muchas veces obtenemos resultados incorrectos que nos hacen pensar que nuestra salud no es buena, cuando en realidad estamos dentro de los parámetros de lo “normal”.
Esto no se debe a que el método sea obsoleto o inservible; la respuesta va más allá. Como mencionamos antes, el IMC se calcula utilizando la estatura y el peso de manera general. Sin embargo, las mujeres tienen, de forma natural y fisiológica, más grasa corporal que los hombres. Entonces, sin ajustes, el resultado tiene un margen de error.
El fisiólogo Chris Dempers menciona para Cleveland Clinic que “existen diferencias clave entre géneros que podrían afectar su confiabilidad como indicador de salud. Por ejemplo, las mujeres suelen tener más grasa corporal que los hombres. Pero no existe una tabla de IMC separada para las mujeres y las personas a las que se les asigna el sexo femenino al nacer”.
Esta limitación en el IMC no solo afecta a las mujeres; los atletas, las personas mayores y aquellas de diversas etnias también pueden tener dificultades para obtener un resultado fiable de su IMC.
Conocer nuestro cuerpo y poder identificar irregularidades es importante para poder tener atención médica oportuna ante un problema de salud como el cáncer. Hoy te contamos cuáles son los síntomas del cáncer de vulva.
Además de tener chequeos regulares con un especialista, es importante llevar un estilo de vida saludable y conocer bien nuestro cuerpo para saber cuando algo no es normal.
De acuerdo con la organización australiana Cancer Council, el cáncer de vulva se presenta en los genitales femeninos externos, aunque también puede desarrollarse en el perineo (la piel entre la vagina y el ano).
Este tipo de cáncer se presenta en la zona de piel que rodea la uretra y la vagina (comprende el clítoris y los labios vulvares). Se manifiesta con un bulto o una llaga en la vulva que puede producir picazón, asegura la Clínica Mayo. Los especialistas de Hopkins Medicine mencionan que esto ocurre cuando se forman y crecen células anormales en los tejidos de la vulva.
Aunque este tipo de cáncer puede ocurrir a cualquier edad, se diagnostica con mayor frecuencia en mujeres adultas mayores en un promedio de edad de 69 años, como asegura Cancer Council.
Entre las causas y factores de riesgo están los virus del papiloma humano (VPH) y el VIH.
Cuáles son los síntomas del cáncer de vulva
Algunos de los síntomas que especialistas de Hopkins Medicine recomiendan tener presentes son los siguientes.
Una llaga abierta que no sana durante semanas o meses.
Sangrado que no forma parte de un periodo menstrual.
Sangrado o pus de una lesión o zona irritada en la vulva.
Un bulto parecido a las verrugas genitales.
Sensación de picazón o ardor.
Bultos o protuberancias notables con textura áspera, que pueden ser rojos, blancos o marrones.
Dolor en el exterior de la vagina.
Decoloración en la zona.
Un lunar en la vulva que cambia de color o forma.
Algunos de estos síntomas, como la picazón y ardor, no solamente corresponden al cáncer sino pueden formar parte de otras condiciones de salud. Por esta razón debes acudir al médico ante cualquier irregularidad, solamente un especialista puede darte un diagnóstico.
El diagnóstico temprano podría hacer la diferencia. Es importante acudir a un especialista que por medio de un examen físico, acompañado de diversos exámenes de laboratorio, logre detectar de manera adecuada el cáncer, como recomienda Cancer Council.
Para prevenirse ante esta enfermedad es necesario acudir a citas periódicas con el médico para detectar anomalías de manera eficaz.
Cada vez se rompen más tabúes con respecto al placer femenino, y esto incluye a la ciencia de los orgasmos. Aunque los orgasmos durante el sueño son comúnmente asociados con los hombres, investigaciones y testimonios demuestran que las mujeres también podemos experimentar este tipo de placer mientras dormimos.
Comúnmente conocidos como “sueños húmedos”, han sido tema de conversación durante años, pero prácticamente siempre lo escuchamos de hombres. Y, aunque no lo creas (aunque muy probablemente sí lo creas), estos orgasmos nocturnos también llegan a ser recurrentes en mujeres.
¿Las mujeres pueden tener un orgasmo mientras duermen?
Foto: Pexels. Rovenimages
Las personas de cualquier sexo biológico o género pueden tener un orgasmo mientras duermen, indica el diario HuffPost. De hecho, se estima que el 80% de los hombres y el 40% de las mujeres han tenido al menos un orgasmo mientras dormían, según un Informe sobre Sexo del Instituto Kinsey.
Y es que el tabú no solo rodea el tema del orgasmo, sino que también existe cierta resistencia a reconocer que las mujeres podemos vivir esta experiencia durante la noche.
A menudo se piensa que los orgasmos o sueños húmedos se dan solo en la adolescencia, pero esto puede ser erróneo, al menos en el caso de las mujeres. Según la plataforma Flo, los orgasmos nocturnos femeninos empiezan alrededor de los 20 años, continuando a partir de entonces.
El reconocimiento y la normalización de los orgasmos nocturnos en mujeres son pasos importantes para una comprensión más amplia de la sexualidad femenina.
A medida que más investigaciones emergen y la conversación pública se amplía, se espera que se promueva un conocimiento sobre los orgasmos femeninos. Entendiendo que es algo totalmente normal y natural.
¿Por qué ocurren los orgasmos nocturnos?
Foto: Pexels. Ron Lach
La ciencia detrás de este fenómeno sugiere que, durante el sueño REM (Movimiento Ocular Rápido), el cuerpo experimenta una serie de cambios fisiológicos que pueden conducir a la excitación sexual. Durante esta fase, el cerebro está altamente activo, y el flujo sanguíneo a los genitales aumenta, lo que puede desencadenar un orgasmo.
Según HuffPost, una investigación realizada por Beverly Whipple y Barry Komisaruk, científicos especializados en el campo, las mujeres incluso al pensar o imaginar el contacto físico podemos tener orgasmos solo con los pensamientos, sin la necesidad de una estimulación física.
Se “observó resonancias magnéticas funcionales del cerebro de mujeres, descubriendo que cuando las participantes pensaban en tocarse los pezones o el clítoris, la corteza sensorial se iluminaba, como si realmente hubieran tocado esa parte del cuerpo”, menciona HuffPost.
Alejándonos un poco de lo científico, muchas personas atribuyen los sueños sexuales durante el periodo REM a la causa de los orgasmos nocturnos. Otra explicación es el estrés, ya que éste puede hacer que experimentemos estos orgasmos de manera más recurrente.
Así que ya lo sabes, los orgasmos nocturnos femeninos son reales.
¿Quién no lo ha intentado? Las apps de citas son la respuesta moderna a uno de los problemas más comunes: si es eres tímida, si se te dan mejor los mensajes que las conversaciones en persona o si no tienes muchas oportunidades de conocer gente nueva, muchas veces las apps de citas pueden ser tu salvación. Pero, ¿te puedes hacer adicta a las apps de citas?
De acuerdo con el portal Dazed Digital, la duda de que las apps de citas podrían causar adicción hizo revuelo a partir de una demanda colectiva que seis personas hicieron el pasado San Valentín en Estados Unidos contra Match Group, empresa dueña de diversas apps y páginas para citas.
Los demandantes acusaron a las apps de tener un modelo de negocio “depredador” que fomenta el uso compulsivo, como lo relata el sitio The Conversation.
¿Las apps de citas pueden ser adictivas?
Foto: Unsplash. Flure Bunny
La demanda que se realizó contra estas apps dicta que resultan adictivas porque usan un sistema de recompensa que libera dopamina y “engaña” al cerebro. La dopamina es un neurotransmisor que se encarga de decidir cuándo y cómo se experimenta el placer como recompensa, como explica The Conversation.
Cheng “Chris” Chen, profesor asistente de diseño de comunicación en la Universidad de Elon, explica para National Geographic que las aplicaciones de citas también utilizan tácticas inteligentes para que los usuarios sigan regresando. Después de todo, las apps siguen siendo un negocio.
No hay una condición médica que se conozca como “adicción a las citas”, pero anecdóticamente muchas personas reportan que su uso de estas plataformas se ha visto fuera de control. Tras una investigación se encontró que el 90% de los solteros se sienten “adictos” a este tipo de apps, mientras que el 70% cree que el uso de estas aplicaciones daña su salud mental, según reportes de Dazed Digital.
La posibilidad de que el “amor de tu vida” este a un clic de distancia puede ser irresistible para muchas personas. Pero esto también podría llegar a ser un problema si no se tiene cuidado con las interacciones que hacemos en las apps.
La doctora Natasha McKeever de la Universidad de Leeds y cocreadora de la red de investigación Ethical Dating Online, explicó para Dazed Digital que “nos enganchan dándonos una inyección de dopamina y un aumento de la autoestima cada vez que recibimos una coincidencia o un mensaje”.
“El cerebro está preparado para volverse adicto, especialmente cuando se trata del amor”, dice Helen Fisher, antropóloga física e investigadora principal del Instituto Kinsey de la Universidad de Indiana para National Geographic.
National Geographic reporta que Match Group niega que exista un peligro dentro de estas apps que solo buscan la conexión entre personas. Es importante, sin embargo, tener cuidado con el tiempo que invertimos en estas apps y en redes sociales.
No existe un diagnóstico como tal para esta adicción, simplemente es cuestión de reevaluar nuestros hábitos, como establece The Conversation. Debes estar atenta a cómo te sientes cuando estás dentro de las apps de citas y poner límites al respecto.
¿Te ha pasado que no logras cumplir las metas que tú misma te propones día con día, a pesar de que das tu máximo esfuerzo? Entonces debes conocer la sisifemia.
El término sisifemia proviene de aquel relato en la mitología griega donde Sísifo, personaje conocido por su astucia y destino trágico, es condenado por los dioses a empujar una enorme piedra cuesta arriba, solo para verla rodar hacia abajo justo antes de alcanzar la cima. La historia de Sísifo evoca una lucha perpetua contra un objetivo inalcanzable.
La llamada “sisifemia” describe esta dinámica, el esfuerzo constante para cumplir metas que muchas veces son interminables o simplemente desafiantes al punto de volverse inalcanzables.
Sisifemia, cuando tú misma te impones objetivos imposibles
El portal español Fidelitis describe la sisifemia como “el padecimiento con agotamiento físico y mental del trabajador, condenado a la ingente tarea de lograr un objetivo inalcanzable, para volver a empezar cada día con la misma condena y la repetida frustración de no verse capaz, a pesar de estar haciendo lo máximo posible en el trabajo”.
Este término fue acuñado por el doctor José Manuel Pardo, director de la cátedra de medicina evaluativa experta de la Católica Universidad de San Antonio de Murcia (UCAM), quien empezó a observar a aquellas personas que sufrían de un estrés extremo por la excelencia obsesiva en sus trabajos.
Foto: Pexels. Yan Krukau
Muchas veces queremos ser una mejor versión de nosotras, cumplir todos esos pendientes y siempre dar lo mejor, no importa la situación. La realidad es que la autoexigencia a veces se puede salir de control y llegar a afectar nuestra calidad de vida.
Es fundamental establecer metas y alcanzarlas, sin embargo, también es vital otorgarnos momentos de descanso y evitar exigirnos en exceso. Esto no implica renunciar a nuestras metas, sino más bien abordarlas con serenidad y reservarnos tiempo para atender nuestras responsabilidades pendientes o alcanzar esos objetivos.
Fidelitis menciona que el agotamiento físico y mental son algunos de los síntomas que se pueden dar debido a la presión constante y la falta de satisfacción de cumplir aquellas tareas u objetivos. La ambición desmedida, así como el perfeccionismo obsesivo, son síntomas de la sisifemia.
A largo plazo, este problema causa un cansancio mental progresivo, esto afecta nuestra concentración y provoca una progresiva pérdida de rendimiento en nuestro día a día, sin mencionar las consecuencias en la salud física y mental.
Causas de la sisifemia
Foto: Pexels. Energepic
En la muchos casos, la sisifemia se desarrolla por las metas de alta demanda que nos proponemos y el corto tiempo que damos para mostrar resultados. Esto crea un ciclo de tareas inacabables.
Este problema es cada vez más común, y lo vemos con mayor frecuencia en ambientes laborales. La autoexigencia y la búsqueda de una aprobación externa nos afecta directamente, y esto puede conllevar problemas de salud.
Según el portal de la Unión Sindical Obrera (USO), en España la sisifemia puede estar relacionada con “la falta de variedad en las tareas laborales, falta de reconocimiento o recompensa por el trabajo realizado, y la falta de oportunidades de desarrollo profesional”. Provocando así un sentimiento de estancamiento y de desmotivación.
Debemos ser más comprensivas y empáticas con nosotras, ponernos objetivos reales y no exigirnos demasiado. Todas llevamos nuestro propio ritmo, y es importante buscar ese punto medio donde sigamos cumpliendo nuestros objetivos de manera que no afecten nuestro estilo de vida.
Recuerda que, si estás teniendo problemas con tu estrés laboral, es importante recurrir a tu red de apoyo cercana o incluso buscar ayuda profesional.
La elección de un método anticonceptivo es fundamental para la salud sexual y reproductiva de las personas. Existen distintos métodos anticonceptivos, desde los métodos de barrera ya conocidos como el condón, hasta los dispositivos intrauterinos (DIU) y los contraceptivos hormonales. ¿Te has preguntado cuál es el método anticonceptivo más efectivo?
Tener una amplia gama de alternativas para una vida sexual segura te permite escoger con la que te sientas más cómoda y sea mejor para tu salud. Pero antes de que tomes una elección, es importante conocer cada uno de estos métodos, cuál es el de mayor eficacia y si tienen algún efecto secundario que pueda afectar tu salud o estilo de vida.
Debemos recordar que cada cuerpo es diferente, por lo que la tasa de efectividad NO es el único factor que deberías tomar en cuenta al elegir un método. Depende de diversas variables como tu estilo de vida y tus condiciones de salud específicas.
¿Cuál es el método anticonceptivo más efectivo?
Foto: Unsplash. Deon Black
Cuando hablamos de efectividad en métodos anticonceptivos, nos referimos a la prevención de embarazos. Según el portal especializado Health cuando se trata de medir la eficacia, los expertos utilizan datos basados en el “uso típico”, o cómo las personas reales utilizan cada método. La tasa de efectividad se calcula contando el número de personas de cada 100 que experimentan un embarazo no deseado durante el primer año de uso típico.
El método más efectivo es el implante subdérmico, con una tasa de fracaso de uso típico de 0.1%, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC).
Pero la prevención de un embarazo no deseado no es lo único que deberíamos tomar en cuenta, pues para tener una vida sexual segura tenemos que protegernos de las infecciones de transmisión sexual (ITS).
El condón es el único método que nos protege de las ITS. La Organización Mundial de la Salud (OMS) menciona que los preservativos (condón) reducen considerablemente el riesgo de infección de transmisión sexual cuando se utilizan de forma sistemática y correcta durante las relaciones sexuales, ya sean por vía vaginal, oral o anal. Protegen contra las infecciones de transmisión sexual que se propagan por medio de las secreciones, así como las ITS que se propagan por contacto con la piel, como la sífilis, el herpes genital y los virus del papiloma humano (VPH).
Es por ello que se recomienda usar condón, aunque se esté utilizando algún otro método anticonceptivo, pues como lo mencionamos antes, es la única forma de prevenir las ITS.
Métodos anticonceptivos y su eficacia
Foto: Unsplash. Reproductive Health Supplies Coalition
El portal Health proporciona datos específicos sobre la tasa de fracasos de cada uno de los principales métodos anticonceptivos existentes, esta información fue extraída de los CDC y de la Oficina de Salud de la Mujer de Estados Unidos.
Recuerda que debes analizar con tu ginecóloga cuál es el mejor método para ti, basándote en el modo de uso, ventajas y desventajas.
1. Condón externo o masculino
Tasa de fracaso de uso típico: 13%, según los CDC.
Por lo general está hecho de látex, aunque también hay condones disponibles en poliuretano o polisopreno, que son adecuados para personas con alergia al látex. Su uso adecuado ayuda a protegerte de las ITS, es por ello que se recomienda combinar el condón con algún otro método anticonceptivo.
Los condones son el método de mayor uso, pues los puedes conseguir en cualquier farmacia a un bajo costo.
2. Condón interno o femenino
Tasa de fracaso de uso típico: 21%, según los CDC.
El condón interno tiene forma de tubo con anillos flexibles en ambos extremos. Uno de los anillos se introduce en la vagina para cubrir el cuello uterino, mientras que el otro queda fuera de la vagina cubriendo los labios externos.
3. Esponja
Tasa típica de fracaso en el uso: 27% en personas que han dado a luz antes y 14% en personas que nunca antes han dado a luz, según los CDC.
La esponja se utiliza dentro de la vagina para prevenir el embarazo al bloquear y absorber los espermatozoides, de igual forma contiene espermicida para inmovilizar o atacar al esperma.
La esponja se debe colocar antes de las relaciones sexuales y dejarse ahí por 6 horas como máximo. Es posible sufrir irritación, picazón o ardor, además de que es sumamente importante no dejarla dentro del cuerpo por más tiempo del que se indica.
4. Diafragma
Tasa de fracaso de uso típico: 17%, según los CDC.
El diafragma es una copa de silicona flexible o goma que se coloca dentro de la vagina y cubre el cuello uterino. Viene en diferentes tamaños para adaptarse a diferentes cuerpos. Es importante saber usar de forma correcta el diafragma, pues su uso incorrecto puede causar irritaciones en el conducto vaginal.
5. Implante
Tasa de fracaso de uso típico: 0.1%, según los CDC.
Es un método a largo plazo, donde se implanta un pequeño dispositivo en la parte interna de la piel del brazo. El implante libera progestina, una hormona similar a la progesterona, en el cuerpo de manera constante durante un periodo de varios años. Esta progestina evita la ovulación, engrosa el moco cervical para dificultar el paso de los espermatozoides y adelgaza el revestimiento del útero, lo que reduce las posibilidades de un embarazo.
Este dispositivo tiene una duración de entre 3 a 5 años. A pesar de ser el método con mayor eficacia, tiene varias reacciones secundarias que pueden variar de mujer a mujer. El implante puede causar irregularidades menstruales, como sangrado irregular, ausencia de menstruación o menstruación más frecuente o prolongada.
De igual forma, sus efectos pueden ser dolores de cabeza, cambios de humor, acné, sensibilidad en los senos, pérdida de peso o ganancia del mismo.
6. DIU hormonal
Tasa de fracaso de uso típico: 0.1% al 0.4%, según los CDC.
Este dispositivo en forma de “T” es colocado por un médico en el interior del útero, liberando constantemente progestina.
Su colocación es sencilla y no tarda más de 15 minutos. Como el implante, el DIU hormonal puede tener efectos secundarios como cambios en tu ciclo menstrual, acné, dolores de cabeza, entre otros.
7. DIU de cobre
Tasa de fracaso de uso típico: 0.8%, según los CDC.
Al igual que el DIU hormonal, éste se implanta de la misma forma; la diferencia es que no contiene la hormona progestina, en cambio, su revestimiento de cobre actúa como espermicida, afectando la movilidad y la supervivencia de los espermatozoides, lo que dificulta la fertilización del óvulo.
Sus efectos secundarios pueden ser similares a los del implante y el DIU hormonal.
8. El parche
Tasa de fracaso de uso típico: 7%, según los CDC.
Este método se adhiere a la piel, liberando hormonas que ayudan a la prevención del embarazo. Las dos hormonas que desprende son el estrógeno y progestina, éstas se absorben a través de la piel y entran en el torrente sanguíneo, evitando así la ovulación.
El parche se coloca en el brazo, abdomen o glúteo. Al ser un método hormonal, tiene varios posibles efectos secundarios como los que mencionamos anteriormente.
9. Píldora
Tasa de fracaso de uso típico: 7%, según los CDC.
Actualmente, existen muchas píldoras anticonceptivas que actúan de la misma forma. Éstas detienen la ovulación, por lo que no se libera ningún óvulo. También espesan el moco cervical.
El uso de las píldoras puede llegar a ser algo confuso para muchas personas, pues se deben de tomar todos los días a la misma hora durante un ciclo de 21 o 28 días, dependiendo del tipo de píldora. Después de terminar un ciclo de 21 días, se hace una pausa de 7 días sin tomar pastillas antes de comenzar un nuevo ciclo.
No se deben confundir con las pastillas de emergencia o del día siguiente.
La amistad es una de las relaciones más bonitas que podemos llegar a tener con las personas. Son conexiones basadas en confianza, respeto y un gran cariño que se forma a través del tiempo. Pero, ¿has tenido amigas que parecen ser más bien tus enemigas? Hoy NOSOTRAS te decimos cómo saber si tienes una “amienemiga”.
En ocasiones nos encontramos con personas que a simple vista parecen ser amigas, pero cuyas acciones o actitudes sugieren lo contrario o nos lastiman.
La existencia de una “amienemiga” puede resultar confusa y, en ocasiones, hasta perjudicial para nuestra salud emocional. Identificar si alguien en tu círculo social encaja en este perfil puede ser crucial para mantener relaciones saludables y evitar situaciones conflictivas.
Por eso NOSOTRAS te decimos algunas de las señales que te ayudarán a descubrir si tienes una “amienemiga” cerca, para diferenciarla de una amistad real que vale totalmente tu cariño y confianza.
¿Cómo saber si tienes una ‘amienemiga’?
Foto: Unsplash. Walter Randlehoff
1. Señala todo lo negativo de tu vida
Don Miguel Ruiz, autor del libro “Los cuatro acuerdos”, señala la importancia de ser cuidadosas con nuestras palabras, pues éstas tienen el poder de crear o destruir.
Hablar constantemente de modo negativo de las personas es una forma de dañarlas emocionalmente, reflejando una actitud negativa hacia la vida del otro.
Una amistad sincera no solamente se concentra en lo negativo de tu vida, también te puede apoyar haciéndote sentir bien y segura de ti misma. No estamos hablando de positividad tóxica, pues tu amiga también puede dejarte desahogar en los momentos malos; sin embargo, es diferente ser realista a decirte siempre lo malo que hay contigo.
2. Maquillan comentarios hirientes con ‘bromas’
¿Alguna vez te has sentido herida durante una conversación debido a una “broma” que alguien hizo sobre ti? Déjanos decirte que esa situación no debería ser normal. En realidad, se trata de una acción pasivo-agresiva que a menudo experimentamos con personas que, se supone, nos aprecian.
Aunque sabemos que las bromas son para reír y no tomarlas en serio, hay una gran diferencia de un chiste normal a un comentario hiriente disfrazado de: “¡Fue una broma!… ¡No es para tanto!”.
3. Habla a tus espaldas
El psicólogo Albert Bandura menciona en su obra “Agresión: un análisis social” como hablar a espaldas de los demás puede traer consecuencias negativas para ambas partes del problema. Albert argumenta que “este tipo de comportamiento puede perpetuar un ciclo de agresión social y contribuir a un clima de desconfianza y hostilidad en las relaciones interpersonales.”
Así que si te enteras de que tu “amiga” ha estado hablando a tus espaldas aunque sea un poco, ¡sal de ahí!
4. No se alegra por tus logros
Cada vez que alcanzas una meta u objetivo, suele haber personas que se alegran sinceramente por tus logros. Sin embargo, las “amienemigas” no comparten esa alegría; por el contrario, pueden sentir incomodidad o incluso resentimiento hacia tus triunfos. En ocasiones, prefieren ignorar tus avances en la vida.
Una amistad auténtica se caracteriza por alegrarse genuinamente de tus victorias y estar siempre presente para buscar tu felicidad.
5. No respeta tus relaciones
Una buena amiga siempre respetará las relaciones que tengas con otras personas; ya sean amigos, pareja o familia.
Uno de los psicólogos que ha abordado el tema de la importancia del respeto por las relaciones de los amigos es John Gottman. En su libro ”Los siete principios para hacer que el matrimonio funcione”, Gottman destaca la importancia del respeto mutuo y la confianza en las relaciones íntimas, enfatizando que los amigos verdaderos respetan las relaciones de los demás y no intentan interferir o generar conflictos en ellas.
Incluso cuando una amiga está en una relación que parece tóxica, hay maneras en las que se puede abordar el tema sin ser hiriente.
6. Dice mentiras
Ya lo hemos dicho, la amistad se basa en la confianza pero, ¿qué pasa cuando las mentiras empiezan a formar parte de la relación?
El psicólogo Carl Rogers menciona en su obra “El proceso de convertirse en persona” la importancia de la transparencia en las amistades, donde argumenta que “la honestidad es esencial para construir y mantener relaciones saludables y significativas ya que crea un ambiente de confianza y sinceridad donde las personas pueden ser verdaderamente ellas mismas.”
Tener amistades puede parecer una tarea fácil, pero en realidad encontrar verdaderas amigas que estén presentes en los momentos buenos y malos es una tarea que lleva tiempo y esfuerzo. Es importante identificar a las “amienemigas” en nuestro círculo social y poner distancia con aquellas que no suman nada positivo a nuestra vida.
Tener buenos hábitos te ayuda a construir una mejor calidad de vida: ejercitarte, seguir una buena alimentación, meditar, incrementar la lectura, son algunos hábitos que muchas veces tal vez te has propuesto. Pero, ¿cuántos han permanecido en tu día a día? Una posible solución es el llamado ‘habit stacking’ o “acumulación” de hábitos.
Según un estudio de la Universidad de Londres, poder crear un hábito toma un promedio de 66 días y, aunque parezca sencillo, puede complicarse para la mayoría de las personas.
La mayoría de NOSOTRAS queremos mejorar nuestras rutinas, para que podamos cumplir nuestras metas y tener una vida tan productiva como equilibrada. Sabemos que para lograr este estilo de vida necesitamos tener ciertos hábitos que nos ayuden a mejorar la relación con nuestro entorno, es por ello que te daremos un buen truco para adoptar buenos hábitos en tu vida.
‘Habit stacking’, el truco que te ayuda a adoptar buenos hábitos en tu vida
Foto: Pexels. Nathan Cowley
William James, uno de los primeros psicólogos dedicados a estudiar los hábitos, mencionó en su libro “Principios de psicología” la importancia de la repetición de comportamientos y cómo esto trae como resultado la formación de patrones automáticos (hábitos).
SJ Scott, autor reconocido por sus libros en desarrollo personal, acuñó el término “acumulación de hábitos” en su obra “Apilamiento de hábitos: 127 pequeños cambios para mejorar tu salud, riqueza y felicidad”. Al poco tiempo, escritores como Charles Duhigg, en “The Power of Habit” y James Clear, en “Atomic Habits” retoman este término, que durante los últimos años ha impactado de forma positiva a muchas personas.
Según el portal Everyday Health, Gail Saltz, profesora clínica asociada de psiquiatría en el Hospital Presbiteriano de Nueva York, define la acumulación de hábitos como la “técnica en la que formamos nuevos hábitos combinando un nuevo cambio de comportamiento deseado con un comportamiento ya existente que realizas habitualmente, o algo que sucede habitualmente en tu día.”
La acumulación de hábitos consiste en ir sumando pequeños cambios positivos a nuestra rutina diaria, creando una especie de cadena de las distintas acciones que queremos implementar en nuestro día a día. Esto ayuda a que recordemos de manera sencilla los hábitos que nos proponemos y sea más fácil poder continuar con ellos.
El truco del ‘habit stacking’ está en juntar los objetivos que quieres cumplir con las tareas diarias que no podrías olvidar. Por ejemplo, si quieres comenzar a meditar cinco minutos al día podrías juntar este nuevo hábito con algo como lavarte los dientes o vestirte. Luego de lavarte los dientes, debes ir a meditar cinco minutos.
¿Cómo poner en práctica la acumulación de hábitos?
Foto: Pexels. Cottonbro
1. Identifica tus metas
El primer paso y el más importante es identificar los cambios que quieres tener en nuestra vida, aquellas acciones que te gustaría implementar, las cuales te ayudarán a cumplir tus metas.
El portal Real Simple recomienda que seas muy específica al establecer tus objetivos: recuerda exactamente en qué va a consistir el cambio y en qué momento del día lo harás.
2. Empieza poco a poco
Una vez identificadas tus metas y los distintos hábitos que pueden ayudarte a lograrlo, incorpora dos o tres a tu día. Es importante empezar poco a poco para que te acostumbres a estos cambios y así sea más sencillo darle una continuidad a la nueva rutina.
La psicoterapeuta Angela Ficken menciona que debes mantener la nueva rutina durante al menos 21 días seguidos para ayudar a que realmente se convierta en parte de tu rutina.
3. Mantén un registro de tu día
Tener un registro, ya sea escrito o por medio de alguna aplicación, ayuda a crear motivación para poder seguir cumpliendo tu nueva rutina. Es una forma de poder palpar tus logros a largo y mediano plazo.
4. Bienvenida la nueva yo
Después de unos cuantos días, te darás cuenta de que aquellos cambios ahora son parte fundamental de tu día a día. Cuando te sientas cómoda con tu nueva rutina diaria, ¡atrévete! Y agrega nuevos hábitos, acumula los que necesites para obtener aquella meta deseada.
El ciclo menstrual es un proceso biológico complejo que experimentamos gran parte de las mujeres mensualmente. Este ciclo se divide en distintas fases, desde la preparación del cuerpo para la fertilización hasta la renovación mensual del revestimiento uterino. Cada etapa juega un papel crucial en el ciclo reproductivo femenino.
Cada una de NOSOTRAS experimenta su ciclo menstrual de forma distinta a como lo viven otras mujeres, esto porque cada cuerpo es único. Pero, a pesar de que los ciclos menstruales no son iguales para todas, existen 4 fases que se pueden nombrar de manera general: menstruación, fase folicular, ovulación y fase lútea.
Aunque sabemos que puede parecer un poco confuso, es importante tener en cuenta estas fases, sus características y cómo nos afectan para así poder identificar cuando hay algo fuera de lo normal o simplemente por nuestra salud reproductiva.
Por ello, NOSOTRAS te explicaremos lo que debes saber de las cuatro fases de tu ciclo menstrual.
¿Por qué es importante conocer las fases de tu ciclo menstrual?
Foto: Pexels. Mike Murray
Comprender las fases de tu ciclo menstrual te permite entender tu cuerpo y tener mayor información como parte de tus derechos reproductivos. Conocer cómo funciona tu ciclo menstrual ayuda a que puedas anticipar los distintos cambios físicos y emocionales que vives.
Tener conocimiento de las fases te puede ayudar a detectar posibles irregularidades en la salud. Al estar conscientes de estos cambios, estás mejor preparada para identificar señales de alerta y buscar atención médica cuando sea necesario.
¿Cuáles son las fases de tu ciclo menstrual?
El ciclo menstrual dura, en promedio, entre 25 y 30 días, indica la organización Planned Parenthood; sin embargo, también puede ser solo de 21 días o durar tanto como 35. El primer día del sangrado es el día uno del ciclo menstrual.
Foto: Pexels. Cottonbro
1. Menstruación
La menstruación es el sangrado que tenemos los primeros días del ciclo, esto se debe a la eliminación periódica del endometrio, un revestimiento del útero.
“El endometrio es el revestimiento interno del útero, el cual se renueva todos los meses con cada ciclo menstrual con el objetivo de albergar un embarazo” menciona la organización Reproducción Asistida en su portal.
La menstruación tiene un periodo de entre 3 y 7 días, esto puede variar. Recordemos que cada cuerpo es diferente.
2. Fase folicular
Esta fase inicia el día 1 de tu ciclo hasta el 14, esta fase se empalma con la menstruación. Durante estos 14 días el estrógeno, hormona principal en esta etapa, aumenta para poder hacer crecer la capa endometrial del útero.
La tarea principal en esta fase es crear un ambiente propicio para los espermatozoides, pues se empieza un proceso de crecimiento de los folículos ováricos. Estos folículos son estructuras microscópicas dentro de los ovarios, las cuales son cruciales en el periodo de ovulación; al crecer, uno de los folículos desarrollará un óvulo completamente nuevo.
Es posible que en la fase folicular te sientas con más energía y vitalidad, al mismo tiempo que notas tu piel más radiante y cabello saludable debido a los niveles crecientes de estrógeno.
3. Ovulación
Alrededor del día 14 la etapa de ovulación comienza, este es el proceso donde el óvulo maduro llega al útero. Puede durar entre 16 y 32 horas, aproximadamente.
El departamento de Salud de la provincia australiana de Victoria menciona que “es posible quedar embarazada en los cinco días previos a la ovulación y el día de la ovulación, pero es más probable en los tres días previos a la ovulación. Una vez liberado el óvulo, sobrevivirá hasta 24 horas. Si los espermatozoides llegan al óvulo durante este tiempo, es posible que quedes embarazada”.
En muchos casos, la ovulación trae como consecuencias un aumento en el deseo sexual.
4. Fase lútea
La fase lútea es la última, da inicio justo después de la ovulación y concluye el día 28 (tomando en cuenta un ciclo de 28 días como promedio.
Durante esta etapa el cuerpo empieza a producir progesterona, hormona que ayuda a revestir el útero para poder recibir la llegada de un óvulo fecundado. De igual forma, la progesterona es conocida por afectar el estado de ánimo y sueño, así como la función del metabolismo.
Algunos otros síntomas posibles en esta fase son una retención de líquidos y sensibilidad en los senos, un aumento de la fatiga y piel más propensa a brotes debido a los cambios hormonales.
No es malo querer tener una relación. Pero, a veces, muchas de nosotras dedicamos tiempo y esfuerzo a la búsqueda de la pareja ideal y es tanta la idea de tener a esa persona especial que pasamos por alto si realmente estamos en un momento apropiado para eso. ¿Te has cuestionado si no estás lista para una relación?
Podemos pensar que las señales son claras, pero la verdad es que puede ser algo complicado de notar cuando estamos listas y diferenciar de cuando no. Está bien sentir ganas de compartir todo con alguien, ¿pero estamos preparadas para lo que eso significa?
Señales de que no estás lista para una relación
Por más que estés deseando tener una relación, a veces lo ideal es preguntarte primero si estás preparada para ello. Sobre todo si estás en una racha en la que ninguna cita te hace feliz o simplemente estás harta de salir con gente nueva.
Debemos recordar que no hay nada de malo con estar soltera sin importar la opinión de los demás, lo importante es que tú te sientas cómoda en tu propia compañía y tomes en cuenta lo que es mejor para ti antes de decidir comenzar una relación.
1. Sientes algo por tu ex
No importa si decimos que lo hemos superado, porque a veces no es cierto, pensamos en que estamos a un mensaje de volver con esa persona.
El portal Glam explica que pueden existir sentimientos persistentes tras la separación y que es muy difícil iniciar una relación nueva si no te haces las preguntas correctas antes.
No hay un periodo de tiempo “correcto” para atravesar el duelo de una relación que terminó, pero sí es necesario darte todo el tiempo que necesites para sanar.
Foto: Pexels. Cottonbro Studio.
2. Nunca has pasado mucho tiempo soltera
Pasar de una relación a otra de forma acelerada no da tiempo para asimilar todo lo que sentimos. Los expertos de Glam aseguran que es necesario sanar la herida que una relación previa ha dejado, antes de empezar en la siguiente.
Es importante recordar que tú ya estás completa, no necesitas que alguien más te complete. No tiene nada de malo tomarte tu tiempo para disfrutarte y discernir qué cosas quieres y cuáles no en tu vida.
3. Te convences a ti misma
Esto es cuando intentas de todo, realmente de todo, para convencerte de que cierta persona que te atrae es la correcta. El portal Bustle afirma que a veces es posible que estemos confundiendo las cosas y forzando las situaciones para convencernos de que estamos conociendo a la persona que se transformará en nuestra historia de amor.
Hay que ser honestas con nosotras y aprender a diferenciar la amabilidad y la amistad de una relación romántica.
Foto. Pexels. Alena Darmel.
4. Crees que solo eres feliz cuando estás con alguien más
Muchas veces querer estar en una relación es porque sentimos que no somos felices a menos de que estemos con alguien, indica el portal Your Tango.
El sitio web Glam afirma que las personas que se aman a sí mismas son más magnéticas porque irradian amor propio y se valoran más. Aprender a amarte a ti antes que a otros podría ser el primer paso para que la persona correcta llegue a tu vida.
5. Inviertes más en buscar el amor que en tus pasatiempos
Expertos de Your Tango mencionan que no está bien pasarse todo el rato planeando en cómo vas a conocer al amor de tu vida, es algo que llegará y mientras llegue puedes invertir tiempo en hacer las cosas que disfrutas más, hacer planes que te hagan conocer a personas increíbles.
6. Notaste problemas de comunicación en ti
Quizá haya problemas en la forma en la que nos comunicamos cuando estamos en pareja porque no comunicamos todo lo que sentimos correctamente y esto crea problemas que podrían estar impidiendo que estemos listas para una relación.
El sitio Glam menciona que trabajar en las habilidades comunicativas nos puede ayudar a establecer una comunicación clave con la persona indicada.
Foto: Pexels. Vera Arsic.
Recuerda que no es necesario que tengas una relación todo el tiempo, necesitamos un tiempo para disfrutar de una soltería que nos permita ser y conocer antes de establecernos con alguien que podría no ser la persona ideal.
Aprender a reconocer las señales sobre si estamos listas o no para una relación podrían hacer la clara diferencia sobre cómo nos sentimos y percibimos al mundo mientras llega una historia de amor.
Es muy probable que alguna vez hayas visto cómo lucen, pero tal vez no sepas exactamente qué son las bolas chinas. Es fácil pensar en ellas solamente como juguetes sexuales, pero en realidad tienen una función que se relaciona con tu salud.
También se llaman bolas Kegel o bolas Ben Wa, y se cree que existen desde alrededor del año 500 de nuestra era.
NOSOTRAS te contamos qué son las bolas chinas y por qué tantas mujeres las utilizan.
Las bolas chinas son esferas pequeñas con peso que se producen específicamente para insertarse en la vagina. Como explica WebMD, normalmente vienen en pares y unidas por una cuerda; se hacen en diferentes materiales como silicona metal y cristal.
Tienen dos usos. Son un dispositivo que se emplea para fortalecer el piso pélvico y también sirven como un juguete sexual.
Lo que conocemos como piso pélvico es un conjunto de músculos que forman una especie de “hamaca” a través de la pelvis, explican los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos. Estos músculos mantienen en su lugar órganos como el útero, la vejiga y los intestinos.
Diversos factores como la edad o haber dado a luz pueden debilitar los músculos del piso pélvico y llevar a condiciones de salud como la incontinencia. Por esta razón existen los ejercicios de Kegel, y las bolas chinas pueden ser una buena herramienta para complementarlos (aunque no son indispensables para hacerlos).
Se cree que fortalecer los músculos del piso pélvico también puede llevar a que las mujeres tengan mejores orgasmos mediante el sexo con penetración vaginal.
La mayoría de las mujeres o personas con vagina pueden utilizar bolas chinas de manera segura. Sin embargo, no pueden usarse durante el embarazo, justo después de dar a luz o tras una intervención quirúrgica. Lo mejor es consultar a tu ginecóloga o médico para tener en cuenta tus condiciones de salud.
Cómo se usan las bolas chinas
Existen diferentes tamaños y pesos para las bolas chinas, por lo que conviene consultar a tu ginecóloga antes de usarlas.
Es posible caminar o hacer diversas actividades mientras tienes las bolas Kegel dentro, pero no puede ser por más de un par de horas como máximo, explica el portal MedicineNet.
Así es como se insertan las bolas Kegel, de acuerdo con MedicineNet y Healthline.
Para empezar, tienes que limpiar las bolas chinas antes y después de cada uso. Checa las instrucciones del fabricante.
Aplica lubricante hecho a base de agua, en las bolas Kegel y en tu vagina.
Acuéstate en una posición cómoda para insertar la primera esfera, con cuidado y hasta que sientas que está firme y segura.
Normalmente las bolas Kegel están unidas por una cuerda delgada, que puedes insertar poco a poco también.
Empuja las bolas Kegel dentro de tu vagina sin temor a que vayan demasiado lejos, siempre y cuando la cuerda siga sobresaliendo fuera de tu cuerpo (como ocurre con los tampones).
Una vez que las bolas están dentro, aprieta los músculos del piso pélvico para mantenerlas ahí.
A partir de esto, es posible llevar a cabo ejercicios de Kegel focalizados para fortalecer los músculos.
Todas conocemos esa sensación en la que, de pronto, la presión del trabajo se vuelve excesiva y no sabemos ni por dónde comenzar; tu mente se bloquea y parece que la situación te rebasó. Hoy NOSOTRAS te contamos algunas cosas que puedes hacer cuando estás muy estresada.
El estrés puede tener consecuencias graves en tu salud física y mental. Si estás sufriendo de estrés constante, es importante buscar ayuda y tomar medidas para atenderte. Pero, para empezar, ¿qué hacer en esos momentos de crisis?
La organización Mental Health America dice que una acción tan sencilla como salir del lugar donde estás sintiéndote abrumada, puede servir para poner distancia entre ti y el estrés.
Por ejemplo, si estás en una oficina simplemente sal al baño, la cafetería o fuera del edificio. Si te está ocurriendo en tu habitación, ve a la cocina por agua o sal a dar un paseo cerca de casa.
Tan solo el hecho de ponerte a caminar entre cinco y 10 minutos, puede ser una manera de hacer ejercicio y liberar endorfinas, explica la plataforma Verywell Health.
2. Haz ejercicios de respiración
Ponerte a respirar profundamente parece obvio y hasta un consejo inútil, pero de verdad puede ayudarte en un momento de crisis.
Intenta lo siguiente: inhala por la nariz por cuatro segundos, mantén el aire por siete segundos y exhala por la boca durante ocho segundos. Otra opción es concentrarte en respirar como lo harías cuando estás lista para dormirte por la noche, o incluso recurrir a una app de respiración guiada.
3. Bebe agua
Verywell Health explica que la deshidratación puede contribuir a hacerte sentir cansada y abrumada. Entonces, entre las cosas que debes hacer está tomar un vasito de agua que te refresque y ayude a despejar.
4. Ponte a escribir
Considera desahogarte mediante la escritura. Prueba este ejercicio: escribe todo lo que llegue a tu mente durante 10 minutos, sin detenerte a pensarlo ni dudar.
Una alternativa es escribir una lista con las cosas que debes hacer, lo cual podría ayudarte a pensar más claramente.
5. Mira algo chistoso
Mental Health America recomienda que busques algo gracioso, puede ser un video que siempre te dé risa o un programa divertido. Tómate unos minutos para hacer esto y despejarte. Si bien puede sentirse como una pérdida de tiempo, estás invirtiendo unos minutos en generar sentimientos de relajación y reducir el estrés.
6. Háblale a un ser querido
Cuando el estrés te ataca, hasta un cúmulo de problemas pequeños pueden parecer algo enorme. Hablar con alguien de tu confianza puede ayudarte a ver las cosas desde una perspectiva distinta.
No significa que debas llamar a alguien simplemente para escuchar un “échale ganas”. No obstante, es posible que tu ser querido te haga ver información que ni estabas tomando en cuenta. Y, aun si no te da una solución, desahogarte te ayuda a sentirte acompañada y con apoyo.
7. Recurre a la aromaterapia
Existen estudios que sugieren que el uso de esencias como la lavanda pueden ayudar a disminuir los síntomas de ansiedad, depresión, fatiga y estrés en pacientes con enfermedades cardiovasculares. Encender una vela o disfrutar un difusor de aromas puede ser beneficioso.
Cómo comenzar a lidiar con el estrés
El Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos dice que, si frecuentemente sufres de estrés, estas son algunas de las primeras acciones que puedes tomar para ayudarte. También es importante reconocer cuando necesitas ayuda profesional.
Escribe un diario.
Descarga apps de ejercicios de relajación o meditación guiada. Practica disciplinas como el mindfulness.
Haz ejercicio regular y sigue una dieta balanceada.
Morderse los labios puede ser un indicador de que estamos nerviosas, pero hacerlo con regularidad se transforma en un hábito que puede causar algunas complicaciones indeseadas y dolorosas. NOSOTRAS te decimos hoy por qué no debes morder tus labios.
Claro que a veces nos podemos morder accidentalmente y casi sin darnos cuenta, pero hacerlo con cierta constancia puede ser malo. Como todo hábito puede ser difícil de abandonar, pero existen métodos eficaces para cuidar nuestros labios y eliminar ese mal hábito de una vez por todas.
¿Por qué nos mordemos los labios?
De acuerdo con el sitio especializado en salud MedicineNet, pueden existir diversas causas para que nos mordamos los labios y pueden clasificarse como físicas y psicológicas.
Entre las causas físicas de este mal hábito se encuentran los problemas de desalineación de los dientes, por ejemplo.
Morderse de forma regular puede ser un comportamiento autoadquirido, como define MedicineNet; se suele presentar en personas estresadas regularmente o con ansiedad, y esto también es tratable consultando a un experto de la salud mental.
¿Por qué no debes morder tus labios?
Además de que lastimamos la piel de los labios al hacerlo, para los expertos surgen algunas inquietudes en la salud. Este hábito puede causar hinchazón, descamación y llagas que podrían llevar a complicaciones si se infectan.
Expertos de Stone Lodge Dental explican que algunas de las repercusiones de este hábito puede provocar molestias con pequeñas heridas en la zona. Estas heridas dan entrada a diversas infecciones bacterianas que detienen el proceso de curación, generando un proceso largo y doloroso además de un riesgo a la salud.
De igual manera, este comportamiento puede afectar nuestros dientes y encías, en los que se puede llegar a ejercer una fuerza indebida de manera repetitiva. Esto resulta en afectaciones a los tejidos blandos y al esmalte dental.
Foto: Pexels. Shiny Diamond
¿Cómo dejar de morderte los labios?
Las opciones son muchas y se puede empezar identificando la causa física o mental, consultando a dentistas o una psicóloga que haga una evaluación correcta del problema para corregir este hábito de manera adecuada por medio de un tratamiento que se ajuste a tus necesidades.
Para tratar y mejorar la salud de tus labios puedes exfoliarlos con cierta regularidad como recomienda el blog de la marca Colgate. Recuerda humectarlos y, antes de exfoliar con cualquier producto, hacer una prueba de alergia para prevenir reacciones adversas.
Asimismo, recomiendan intentar prácticas como la atención plena, que pueden ayudarte a enfrentarte a la idea de morderte los labios y detenerte al detectarlo. Así notarás en que momento lo haces y podrás tomar control de la situación priorizando la salud de tu boca.
Tener una sólida autoestima nos permite sentirnos más seguras, confiar plenamente en nuestras habilidades y desarrollar mayor bienestar emocional. Hoy NOSOTRAS te compartimos algunos hábitos que mejoran tu autoestima.
Trabajar en tu autoestima es una de las cosas que puedes hacer para cuidar tu salud mental y, por ende, tu bienestar en general.
¿Qué es la autoestima?
Según el portal de la Universidad del Pacífico de Lima, el psiquiatra Enrique Rojas define la autoestima como “un juicio positivo sobre uno mismo, al haber conseguido un entramado personal coherente basado en los cuatro elementos básicos del ser humano: físicos, psicológicos, sociales y culturales. En estas condiciones va creciendo la propia satisfacción, así como la seguridad ante uno mismo y ante los demás”.
Foto: Pexels. Andrea Piacquadio
La autoestima es aquella valoración que tenemos de una misma. Es el juicio que desarrollamos de nuestro valor como personas. Tener autoestima hace que nos sintamos suficientes, felices, capaces y dignas; estás emociones vienen de la mano con el amor y respeto que nos tenemos.
Existen varios hábitos que puedes incluir en tu rutina diaria para la mejora de tu autoestima.
Hábitos que mejoran tu autoestima
Foto: Pexels. Elle Hughes
NOSOTRAS te compartiremos 6 hábitos que te pueden ayudar a mejorar tu autoestima y serán un boost para desarrollar ese amor propio que muchas veces nos hace falta.
1. Rodéate de personas positivas
Estamos seguras de que en más de una ocasión has escuchado la frase “dime con quién andas y te diré quién eres”, y es que es frase a veces es completamente real y no solo un invento de las mamás.
Las personas con las que te rodeas habitualmente influyen directamente en tu personalidad, así que si tu círculo social está compuesto por personas que no atribuyen de forma positiva, es posible que esto te esté afectando y tu autoestima no esté en el punto más alto.
Rodearte de las personas correctas te ayuda a tomar mejores decisiones, son motivantes para alcanzar tus sueños y metas, te hacen sentir querida y, sobre todo, comparten momentos inolvidables.
Las personas de tu círculo social deben tratarte con respeto y no transgredir los límites que tengas. Pasa tiempo con la gente que de verdad te valora, aconseja la revista Inc.
2. Toma descansos de las redes sociales
Hoy en día las redes sociales son una plataforma donde todos publican sus logros, pero muy pocos se atreven a mostrar aquellos momentos difíciles que todo el mundo vive. Siempre vemos los cuerpos “perfectos”, las vidas impecables de muchas celebridades, las vacaciones soñadas de aquellos amigos o conocidos.
Esto ha llevado a que nos comparemos con todos aquellos perfiles que vemos en distintas plataformas digitales, cuando la realidad es totalmente diferente, porque detrás de esa relación “perfecta” en Instagram hay un sinfín de ediciones. ¡No te dejes engañar por todo lo que ves en el mundo digital!
Deja de compararte con los demás y toma un descanso de todas las publicaciones que se suben en las diferentes redes sociales, te aseguramos que muchas veces no es lo que parece.
3. Háblate con amor
La mente es muy poderosa. Por ello debes entender que tus pensamientos y palabras son importantes para tu autoestima.
La autocompasión significa tratarte con amabilidad, explica la plataforma Psychology Today. Cuando cometemos errores o fallamos en algo, lo que deberíamos hacer sería motivarnos en lugar de autocriticarnos.
Una manera efectiva de practicar la autocompasión es preguntándote cómo tratarías a una amiga que se encuentra en las mismas circunstancias que tú.
Tener pensamientos positivos te ayuda a tener acciones positivas. No es que por hablarte bonito todos tus problemas se vayan a resolver, pero tratarte bien no tiene resultados negativos. Háblate con amor, dedícate un día para ti, ¡consiéntete!
4. Celebra tus logros, no importa su tamaño
¿Al fin lograste correr esos 5 kilómetros? Celebra y siéntete orgullosa, porque no existen los logros pequeños y mucho menos los insignificantes. No importa lo que hayas logrado últimamente, festéjalos.
A veces nos vamos a los extremos cuando se trata de sueños o metas, explica Psychology Today. No solemos darle el valor suficiente a lo que hemos logrado.
Sal con tus amigos o familia y comparte ese sentimiento de alegría con tus seres queridos; una copa de vino, una salida a un museo o alguna cena es una gran forma de conmemorar un nuevo éxito en tu vida.
5. Deja ir el pasado; concéntrate en el ahora
Muchas veces nos quedamos estancadas con el pasado, y esto hace que nos pongamos una barrera que afecta nuestro camino al éxito. Es importante dejar ir para sentirnos liberadas; te aseguramos que es de las mejores decisiones que podrás tomar en tu vida.
Esto lo puedes implementar mediante disciplinas como el ‘mindfulness’, que se refiere a la atención plena y vivir el presenta.
Además, todas las personas podemos beneficiarnos de sanar heridas del pasado con ayuda de terapia.
6. Desarrolla una habilidad nueva
No importa la habilidad o deporte que te gustaría aprender, ¡hazlo! El desarrollo de nuevas habilidades y competencias ayuda a las personas a mejorar su rendimiento en la vida.
Aprender cosas nuevas siempre trae beneficios; te concentras, conoces personas nuevas, te sientes más productiva y tu autoestima mejora.
En ocasiones queremos regresar para reparar el pasado, pero eso es imposible, lo único que logras es un desgaste mental donde dejas de crecer como mujer. ¡La vida sigue; disfrútala!