El jengibre, de sabor y olor picante, exótico y muy aromático, tiene una tradición milenaria tanto con fines medicinales como culinarios. Se trata de un tubérculo que nace en la raíz (rizoma) de una hierba que puede medir hasta 1.8 metros de altura, de hojas alargadas y vistosas flores, semejantes a un lirio, mientras que el tubérculo, grueso y abultado, adquiere caprichosas formas que pueden sugerir extrañas figuras en la imaginación.
Hoy te platicamos sobre algunos beneficios del jengibre, además de los orígenes de este tubérculo.
De dónde viene el jengibre
Esta planta con rizoma de la familia de las zingiberáceas es de origen de las zonas tropicales de Asia Central y Sudeste asiático, donde lo utilizaban, sobre todo, para aliviar problemas digestivos desde hace más de 5 mil años, y se hizo imprescindible tanto en la medicina hindú ayurvédica como en la medicina tradicional china.
Cuando el comercio de tejidos y especias se empezó a extender, el jengibre recorría miles de kilómetros desde Oriente montado a lomos de los camellos para llegar hasta otras civilizaciones.
Aunque es una planta típica de Asia, su producción alcanza todas las regiones tropicales y subtropicales de Asia, como India, (de donde, en la actualidad, procede casi el 50% de la cosecha mundial) China, Japón y Tailandia, así como en la mayor parte de las zonas cálidas del mundo, países de África, Brasil, Jamaica o zona norte de Australia.
Qué le pasa a tu cuerpo cuando consumes jengibre
Aquí van algunos beneficios del jengibre. Para empezar, es conocido por estimular el apetito y los jugos gástricos, además provee efectos de alivio para la gripe y la tos.
Esta raíz es una hierba medicinal usada principalmente para el tratamiento de la dispepsia, esto incluye los síntomas de hinchamiento, acedía (sensación de ardor en el estómago provocada por un exceso de ácido en el mismo), flatulencia y vómitos, dado que las enzimas del jengibre catalizan rápidamente las proteínas digestivas en el estómago, por lo que dejan poco tiempo para la náusea.
Es antinflamatorio y muy útil en casos de reumatismo, alivia el dolor asociado a la artritis reumática, osteoporosis y pacientes con desórdenes musculares, además de funcionar como antioxidante.
Entre las contraindicaciones se indica que, en caso de cálculos biliares se debe emplear previa consulta con un médico y no debe utilizarse para las náuseas del embarazo.
Más beneficios del jengibre
Esto también es parte de lo que le pasa a tu cuerpo si consumes jengibre, de acuerdo con un artículo de WebMD.
- Ciertos compuestos químicos en el jengibre fresco ayudan a tu cuerpo a protegerse de los gérmenes, son buenos para detener el crecimiento de bacterias como E.coli y shigella, además de virus como el VSR.
- Su poder antibacteriano también le ayuda a tu sonrisa, pues compuestos activos llamados gingeroles evitan que crezcan las bacterias orales.
- En algunos estudios, personas con dolores musculares por el ejercicio que tomaron jengibre tuvieron menos dolor al día siguiente que quienes no lo tomaron.
- Calma los síntomas de la artritis. Es un antiinflamatorio, lo cual puede ser muy útil para tratar los síntomas de la artritis reumatoide y la osteoartritis. Puede obtener alivio del dolor y la hinchazón ya sea tomando jengibre por vía oral o usando una compresa o parche de jengibre en la piel.
- El jengibre en polvo puede ayudar a calmar los cólicos menstruales. En estudios, las mujeres que tomaron mil 500 miligramos de jengibre en polvo una vez al día durante 3 días durante su ciclo sintieron menos dolor que las mujeres que no lo hicieron.
- Una dosis diaria de jengibre puede ayudarte a combatir niveles de colesterol “malo”. En un estudio reciente, tomar 5 gramos de jengibre al día durante 3 meses redujo el colesterol LDL de las personas en un promedio de 30 puntos.
El jengibre en la cocina
El jengibre se come y utiliza pelado y sin corcho. El consumo de esta raíz puede ser en forma desecada, pulverizada, fresca, confitada, en tabletas, en jarabes, etc. Y es muy útil en la preparación de sopas, ensaladas, purés, guisos, pescados o vegetales, bebidas, dulces, postres, etc., a los que les otorga una sazón especial.
Su uso se ha extendido por las cocinas de todo el mundo, aunque a la hora de utilizarlo, se recomienda ir probando la preparación del alimento para paladear el sabor que queremos conseguir, debido a su especial y fuerte carácter.
Isabel Martínez Pita
EFE Reportajes
*Con información adicional de WebMD.