Les escribo estas líneas desde un avión que me lleva a Milán, específicamente a la semana de la moda Italiana. Estoy tan emocionada como lo estaba en 2009 que asistí por primera vez a un desfile en Nueva York.

Tuve que dejar de cubrir las Fashion Weeks durante un tiempo. Primero por la pandemia y después por el nacimiento de Rafaela… así que han pasado casi tres años desde mi ultima cobertura, que justo fue en Milán antes de que el Covid hiciera explosión y nos cambiara para siempre.

Por supuesto que en las próximas semanas vamos a hablar de moda –muchísima– moda, por ello hoy me quiero enfocar en una parte de los desfiles que también me apasiona y es la belleza, empezar por el beauty look que acompaña los looks de pasarela es el complemento perfecto y la arista que teje la historia en conjunto con la colección.

Así han cambiado ‘Fashion Week’

Por años estuve en el backstage de las pasarelas viendo como se orquestaba todo, desde la idea creativa hasta el desarrollo, ejecución y logística de los looks, entrevistando a las mentes creativas detrás de las grandes marcas que trabajan hombro a hombro con los genios de la industria. Es sumamente interesante para una insider como yo, ver y palpar cómo funcionan las cosas en las grandes ligas… aprendí muchísimo.

Ahora, claro que las cosas han cambiado desde la última cobertura que hice, seria iluso pensar que no. No solo porque el mundo y sus costumbres se modificaron por la pandemia, sino porque en general el mundo y la sociedad mutan constantemente.

Leía en Business of Fashion [BOF] que muchos maquillistas y marcas ya no buscan enloquecidamente –como era antes- estar en los looks de belleza detrás de las pasarelas. Además de que es una gran inversión de tiempo, recursos y energía, al parecer esa presencia ya no es tan rentable como lo era antes y, lejos de sumar, resta. Por lo que prefieren invertir ese tiempo y dinero en otro tipo de actividades y activaciones de marca que tienen un alcance mayor y son rentables.

Influencers, parte importante del futuro de la belleza

En otra línea paralela, las celebridades y creadoras de contenidos enfocados a beauty al parecer sí han podido convertir esos seguidores que parecieran salidos de un juego de Monopoly en dinero real y un crecimiento de sus marcas bastante tangible fuera de las pantallas de celular. Las marcas gigantes de nombre importante no han contado con la misma suerte, probablemente porque sus planes de medios y mercadotecnia se planean con bastantes meses de anticipación y no logran adaptarse rápidamente a las tendencias que cambian en cuestión de horas.

El reto siempre será convertir esos millones o miles de seguidores, esos contenidos, fotos, videos y reels en ventas y millones de dólares.

El futuro de la belleza en las Semanas de la moda

Los maquillistas y estilistas sin duda se han convertido en celebridades a la par de sus clientas. Su fama crece como las audiencias en Instagram, que al mencionarlos los ponen en el ojo del huracán, los fans saben que a donde vayan ellos irá el artista. Incluso en un descuido publicará algo relevante, la ubicación del hotel, o alguna fiesta VIP, el backstage de algún concierto, película o serie; por eso estos personajes son los nuevos ‘it boys’ y ‘girls’, porque están en el ojo del huracán y son quienes hoy por hoy, marcan las tendencias de la industria al desarrollarlas en sus clientas que mueven miles de millones no solo en el mundo digital sino en la televisión y la música.

Entonces claro que ir a Fashion Week antes era visto como algo aspiracional e importante en la carrera de cualquier maquillista o peinador. Hoy no necesariamente lo es, y podría significar una gran inversión de tiempo y recursos económicos propios que no siempre se rentabilizaran en más oportunidades para su carrera.

Aunque yo personalmente, sí creo que ese tipo de experiencias dan muchas herramientas para el trabajo diario dentro de la industria.

Estoy emocionada por volver a Milán y sumergirme en este mundo de ilusiones.

Con cariño,
Gina